A. ¿Por qué los hombres muestran, instintivamente, aptitudes especiales e inclinaciones buenas o que parecen innatas en ellos?

La razón es fácil de entender: ese es el bagaje que, al reencarnar, los Espíritus traen de sus existencias precedentes. Las aptitudes y las inclinaciones son el fruto de lo que hicieron y de lo que adquirieron en el pasado. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

B. ¿Cómo comprender las malas tendencias naturales que el hombre presenta en una nueva existencia?

Esas malas tendencias naturales son restos de las imperfecciones del Espíritu, y de las cuales no se ha despojado completamente. También son indicios de las faltas que cometió y es el verdadero pecado original. En cada existencia debe purificar algunas de sus impurezas. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

C. Entonces, ¿debemos atribuir a la reencarnación la diversidad de las aptitudes innatas, morales e intelectuales que conocemos muy bien en el mundo en que vivimos?

Evidentemente. La diversidad de las aptitudes innatas, morales e intelectuales, es la prueba de que el alma ya ha vivido, porque en el caso de haber sido creada al mismo tiempo que su cuerpo actual, no habría motivo para que existan en el mundo almas más adelantadas que otras. ¿Por qué existen en el mundo los salvajes y los hombres civilizados, individuos buenos y malos, tontos e inteligentes? Al afirmar que unos han vivido más que los otros, y que han adquirido más en conocimiento y moralidad, todo se explica. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

Texto para la lectura

112. Los Espíritus, al encarnar, llevan consigo lo que han adquirido en sus existencias precedentes; esa es la razón por la que los hombres muestran instintivamente aptitudes especiales, inclinaciones buenas o malas que parecen innatas en ellos. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

113. Las malas tendencias naturales son restos de las imperfecciones del Espíritu, y de las cuales no se ha despojado completamente; también son indicios de las faltas que cometió y es el verdadero pecado original. En cada existencia debe purificar algunas de sus impurezas. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

114. El olvido de las existencias anteriores, es un beneficio de Dios quien, en su bondad, ha querido ahorrar al hombre los recuerdos, muy a menudo, penosos. En cada nueva existencia el hombre es lo que ha hecho de sí mismo; para él es un nuevo punto de partida, conoce sus defectos actuales; sabe que esos defectos son las consecuencias de los que tenía; de ello deduce el mal que pudo cometer, y eso le es suficiente para trabajar a fin de corregirse. Si otrora tenía defectos que ya no tiene, no tiene que preocuparse por ello; tiene muchas imperfecciones actuales. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

115. Si el alma nunca ha vivido, sería porque fue creada al mismo tiempo que el cuerpo; en esa suposición, ésta no podría tener ninguna relación con las que le precedieron. Nos preguntamos entonces cómo Dios, que es soberanamente justo y bueno, puede haberla hecho responsable de la falta del padre del género humano, manchándola con un pecado  original que no cometió. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

116. Al decir, por el contrario, que ella trae al renacer el germen de las imperfecciones de sus existencias anteriores; que sufre en la existencia actual las consecuencias de sus faltas pasadas, se da al pecado original una explicación lógica que cada uno puede comprender y admitir, porque el alma solo es responsable de sus propias obras. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

117. La diversidad de las aptitudes innatas, morales e intelectuales, es la prueba de que el alma ya ha vivido; si hubiese sido creada al mismo tiempo que su cuerpo actual, no sería conforme a la voluntad de Dios hacer a unas más adelantadas que las otras. ¿Por qué los salvajes y los hombres civilizados, los buenos y los malos, los tontos y las personas inteligentes? Al afirmar que unos han vivido más que los otros, y que han adquirido más, todo se explica. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

118. Si la existencia actual fuese única y solo ella debiera decidir el futuro del alma para la eternidad, ¿cuál sería la suerte de los niños que mueren a tierna edad? No habiendo hecho ni bien ni mal, no merecen recompensas ni castigos. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

119. Según la parábola de Cristo, cada uno es recompensado según sus obras, no tienen derecho a la felicidad perfecta de los ángeles, ni merecen que se los prive de ella. Decid que en otra existencia podrán cumplir lo que no hicieron en ésta que fue breve, y ya no habrá  excepciones. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

120. Por la misma razón, ¿cuál sería la suerte de los cretinos y de los idiotas? Al no tener ninguna consciencia del bien y del mal, no tienen ninguna responsabilidad de sus actos. ¿Sería Dios  justo y bueno si hubiese creado almas estúpidas para condenarlas a una existencia miserable y sin compensación? (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

121. Admitid, por el contrario, que el alma del cretino y del idiota es un Espíritu castigado en un cuerpo que no puede expresar su pensamiento, donde está como un hombre atado por cuerdas y ya no tendréis nada que no esté conforme con la justicia de Dios. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

122. En las encarnaciones sucesivas, dado que el Espíritu poco a poco se despoja de sus impurezas y se perfecciona mediante el trabajo, llega al final de sus existencias corporales; entonces, pertenece al orden de los Espíritus puros o ángeles, y goza al mismo tiempo de la vida completa de Dios y de una felicidad inmaculada para toda la eternidad. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

123. Al estar los hombres en expiación en la Tierra, Dios, como un buen padre, no los deja librados a sí mismos, sin guías. Primero tienen sus Espíritus protectores o ángeles de la guarda, que velan por ellos y se esfuerzan en conducirlos por el buen camino; tienen además a los Espíritus en misión en la Tierra, Espíritus superiores que de tiempo en tiempo encarnan entre ellos, para alumbrar el camino con sus trabajos y hacer progresar a la Humanidad. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

124. Si bien Dios ha grabado su ley en la conciencia, creyó que debía formularla de manera explícita; primero les envió a Moisés; pero las leyes de Moisés eran apropiadas para los hombres de su tiempo y por ello solo les habló de la vida terrenal, de penas y de recompensas temporales. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

125. Cristo llegó después, para completar la ley de Moisés con una enseñanza más elevada: la pluralidad de las existencias, la vida espiritual, las penas y las recompensas morales. Moisés los condujo mediante el temor, Cristo por el amor y la caridad. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

126. El Espiritismo, actualmente mejor comprendido, añade, para los incrédulos, la evidencia a la teoría; prueba el porvenir con hechos patentes; afirma, en términos claros y sin equívocos, lo que Cristo dijo mediante parábolas; explica las verdades desconocidas o falsamente interpretadas; revela la existencia del mundo invisible, o de los Espíritus, e inicia al hombre en los misterios de la vida futura; viene a combatir el materialismo, que es una rebelión contra el poder de Dios; en fin, viene a establecer entre los hombre el reino de la caridad y de la solidaridad anunciada por Cristo. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

127. Moisés preparó el terreno, Cristo sembró, el Espiritismo viene a cosechar. (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.)

128. El Espiritismo no es una luz nueva, sino una luz más brillante porque surge en todos los puntos del globo, a través de la voz de los que han vivido. Al hacer evidente lo que estaba oscuro, pone fin a las interpretaciones erróneas, y habrá de reunir a los hombres en una misma creencia, porque solo hay un solo Dios y sus leyes son para todos; finalmente, señala la era de los tiempos predichos por Cristo y los profetas.  (El Espiritismo en su  más simple expresión – Resumen de la Enseñanza de los Espíritus.) (Continúa en el próximo número.)