Estudio de las Obras de Allan Kardec
por Astolfo O. de Oliveira Filho

Año 11 – Nº 526 – 23 de Julio de 2017

La Revista Espírita de 1860
Parte 6

Continuamos en esta edición el estudio de la Revue Spirite de 1860, publicación mensual de divulgación espírita fundada y dirigida por Allan Kardec. Este estudio fue basado en la traducción al idioma portugués realizada por Júlio Abreu Filho y publicada por EDICEL. Las respuestas a las preguntas propuestas se encuentran al final del texto para la lectura.


Preguntas para el
debate 


A. ¿Por qué Kardec dice que las ideas espíritas pueden reducir las causas de la locura y el suicidio?

B. ¿Debemos corregir los errores ortográficos contenidos en las comunicaciones espíritas?

C. ¿Qué le ocurre al Espíritu en los casos de idiotez?

D. ¿A qué debemos el predominio de los instintos animales en el hombre?


Texto para la lectura


123. En una nueva carta, el Dr. Morhéry relata las curaciones obtenidas por la Srta. Désirée Godu: "La Srta. Godu no es sonámbula. Jamás consulta a distancia, ni siquiera en mi domicilio, sino bajo mi dirección y mi control.” “Cuando estamos de acuerdo, lo que casi siempre sucede, comenzamos el tratamiento.” La médium hace entonces los apósitos y se desempeña como una enfermera, con un celo ejemplar, en nuestra modesta casa de salud improvisada. (P. 190)

124. En la mayoría de los casos, la Srta. Godu aplica un tópico de extractos, compuesto de una o dos sustancias, que se encuentran por todas partes, tanto en la cabaña como en el castillo. Otras veces, utiliza un ungüento muy sencillo, pero que produce efectos seguros y muy variados. (P. 191)

125. La locura deriva de una predisposición natural y tiene como causa primera una relativa debilidad moral, que vuelve al individuo incapaz de soportar el choque de ciertas impresiones, en cuyo número figuran, por lo menos en las tres cuartas partes de los casos, la tristeza, la desesperación, la decepción y todas las tribulaciones de la vida. (P. 192)

126. Dar al hombre la fuerza necesaria para ver esas cosas con indiferencia es atenuar la causa más frecuente que lo lleva a la locura y al suicidio. Ahora bien, la Doctrina Espírita le da esa fuerza. (P. 192)

127. Uno de los efectos del Espiritismo es dar al alma la fuerza que le falta en muchas circunstancias, y es en esto que él puede reducir las causas de la locura y el suicidio. (P. 193)

128. Kardec transcribe del libro “Tres años en Judea” un curioso hecho ocurrido con el profeta Esdras que, guiado por un ángel, escribió de forma ininterrumpida el texto que compone la Torá o Pentateuco mosaico. (PP. 194 y 195)

129. Un error de ortografía cometido por el Espíritu de Channing en un mensaje obtenido mediante escritura directa suscitó la protesta del Sr. Mathieu y el siguiente comentario de Kardec: Si la forma del mensaje tuviera un error, debemos corregirlo; corresponde al hombre ese cuidado. Y solo debemos conservarlo intacto cuando el hecho pueda servir de enseñanza. Ese no era el caso. (P. 196)

130. La vanidad, dice Georges, mancha todos los pensamientos; penetra el corazón y el cerebro. Planta maligna, ahoga la bondad en su germen, y todas las cualidades son aniquiladas por su veneno. Para luchar contra ella, es necesario emplear la oración, porque solo ella nos da humildad y fuerza. (P. 197)

131. Solo los Espíritus superiores, dice Alfred de Musset, pueden comunicarse indistintamente por todos los médiums y mantener con todos el mismo lenguaje. Cuando nos comunicamos a través de un médium, la emanación de su naturaleza se refleja más o menos sobre nosotros. (P. 200)

132. Las comunicaciones elevadas no dependen de la cultura del médium, porque solo la esencia de su alma se refleja sobre los Espíritus. (P. 200)

133. La Revue informa que se publica en Génova el periódico "L'Amore del Vero", dirigido por el Dr. Pietro Gatti, director del Instituto Homeopático de Génova y adepto esclarecido del Espiritismo. (PP. 200 y 201)

134. En la Sociedad Espírita de París se lee una carta que dice que en ciertas localidades el clero se ocupa seriamente del estudio del Espiritismo y que miembros esclarecidos de la Iglesia hablan de él como de algo llamado a ejercer una gran influencia en las relaciones sociales. (P. 206)

135. Kardec dice que hay mucha tendencia a ver en el Espiritismo un medio de adivinación, lo que es contrario a su objetivo. (P. 207)

136. Reportándose el caso de un muchacho de 13 años que ofrecía un curioso tema de estudio, por su originalidad, San Luis aconseja que esos fenómenos no sean provocados y sugiere a la Sociedad que continúe ocupándose, como hizo hasta entonces, en profundizar los asuntos importantes; de lo contrario, sucedería el alejamiento de los Espíritus serios. (P. 208)

137. Kardec habla sobre la frenología, la ciencia que trata de las funciones atribuidas a cada parte del cerebro, fundada por el Dr. Gall, y critica el materialismo de los que piensan que los órganos cerebrales son la fuente misma de las facultades humanas. (P. 209)

138. En el loco, si el órgano que servía a las manifestaciones del pensamiento está averiado debido a una causa cualquiera, el pensamiento no puede manifestarse de manera regular. Ahora bien, el cerebro es el instrumento del pensamiento, como el ojo es el instrumento de la visión. Si el instrumento está deteriorado, no se dará la manifestación, exactamente como quien pierde los ojos ya no puede ver. (P. 210)

139. En el caso de la idiotez, el Espíritu está como aprisionado y sufre esa constricción, pero no por eso deja de pensar como Espíritu. Aislando el Espíritu de la materia, se prueba que los órganos no son la causa de las facultades sino simples instrumentos. (P. 211)

140. En el concepto materialista, ¿qué es un idiota? Nada; apenas un ser humano. Pero él es un ser dotado de razón, como todo el mundo, apenas enfermo del cerebro desde el nacimiento, como otros lo son de las piernas. (P. 211)

141. La fisiognomía está basada en el principio indiscutible de que es el pensamiento el que pone los órganos en juego, que imprime ciertos movimientos a los músculos. (P. 211)

142. Los instintos animales del hombre se deben a la imperfección de su Espíritu, aún no purificado y que, bajo la influencia de la materia, da preponderancia a las necesidades físicas sobre las morales. (P. 213)

143. Un Espíritu, al reencarnar, no trae ninguna semejanza con el cuerpo habitado anteriormente, pues es raro que el Espíritu no venga en una nueva existencia con disposiciones sensiblemente modificadas. Así, de los rasgos fisiognómicos no es posible sacar algún indicio de las existencias anteriores. (PP. 213 y 214)  (Continúa en el próximo número.)


Respuestas a las preguntas


A. ¿Por qué Kardec dice que las ideas espíritas pueden reducir las causas de la locura y el suicidio?

Después de explicar que la locura deriva de una predisposición natural y tiene como causa primera una relativa debilidad moral, que vuelve al individuo incapaz de soportar el choque de ciertas impresiones como la tristeza, la desesperación, la decepción y todas las tribulaciones de la vida, Kardec dice que la Doctrina Espírita da al hombre la fuerza necesaria para ver esas cosas con indiferencia y, de ese modo, atenuar la causa más frecuente que lo lleva a la locura y al suicidio. (Revue Spirite, pp. 192 y 193.)

B. ¿Debemos corregir los errores ortográficos contenidos en las comunicaciones espíritas?

Sí. Si la forma del mensaje tuviera un error, debemos corregirlo. Esa es la opinión de Kardec, que dice que corresponde a los hombres ese cuidado. El mensaje solo debe ser conservado intacto cuando el hecho pueda servir de enseñanza. (Obra citada, p. 196.)

C. ¿Qué le ocurre al Espíritu en los casos de idiotez?

En el caso de idiotez, el Espíritu está como aprisionado y sufre esa constricción, pero no por eso deja de pensar como Espíritu. El idiota es un ser dotado de razón, como todo el mundo, apenas enfermo del cerebro desde el nacimiento, como otros lo son de las piernas. (Obra citada, pp. 210 y 211.)

D. ¿A qué debemos el predominio de los instintos animales en el hombre?

Eso se debe a la imperfección de su Espíritu, aún no purificado, y que, bajo la influencia de la materia, da preponderancia a las necesidades físicas sobre las morales. (Obra citada, p. 213.)

 
Traducción:
Maria Reyna - mreyna.morante@gmail.com

 

     
     

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