El presentador del programa Café con Luz habla a la revista

Maurício de Queiroz Curi (foto), natural de Brasilia (DF), nació en cuna espírita. Por ello vivenció la infancia y la juventud espírita con bases seguras, usando el arte (teatro, música, literatura) como formas de aprendizaje y divulgación de la Doctrina. Trabajó como facilitador en grupos de estudios del Espiritismo, y siendo aún muy joven fue atraído naturalmente hacia el trabajo con la palabra escrita y hablada, ya fuera en la tribuna como conferencista o como médium esclarecedor, o como escritor. Actualmente, coordina en el Gremio Espírita Atualpa Barbosa Lima la sección de Atención Fraterna. En la Federación Espírita del Distrito Federal, está actualmente en la coordinación de NEPE-FEDF (Núcleo de Estudios e Investigaciones del Evangelio). En la FEB es colaborador eventual de la revista “Reformador” con artículos y poesías, y escribe también en el “Jornal Brasilia Espírita”. Desde el 2015, colabora con el programa Café con Luz, tanto en la conducción de los conversatorios, como ayudando en la producción con el estimado equipo de la FEB TV. Graduado en Arquitectura y Urbanismo en la Universidad de Brasilia, trabaja profesionalmente como arquitecto y diseñador en la capital federal.

¿Qué lo motivó a la creación del programa Café con Luz?
Después de una experiencia de trabajo en video, junto con los amigos de la FEDF (Federación Espírita del Distrito Federal), quedó registrada en nuestra mente la idea de hacer algo más, utilizando el precioso recurso de los videos, de la TV y de Internet. En el 2013, después de grabar un video con el amigo Haroldo Dutra Dias, conversamos sobre la necesidad de enriquecer la forma de los programas de TV en la divulgación doctrinaria, buscando volverla más “placentera”, atractiva en la forma, ya que el contenido espírita es riquísimo. Haroldo hablada de la idea de tal vez hacer un programa de conversación, de charlas, en la cocina de una hacienda al pie de un horno de leña, recibiendo amigos y personalidades de dentro y fuera del movimiento espírita, pero que estuvieran comprometidas en las tareas iluminativas de acuerdo con la propuesta transformadora del Evangelio Espírita-Cristiano. Aquello quedó grabado en nuestra mente, reforzando las inspiraciones anteriores. Hasta que en el 2014 presentamos una propuesta de programa de TV a los amigos de la FEB TV.  La idea fue bien recibida, pero solo pudo materializarse durante el mes de abril del 2015, cuando en menos de dos días, en la sala destinada a los conferencistas, durante el III Congreso Espírita del DF, realizado en el centro de convenciones Ulysses Guimarães, grabamos los doce episodios que dieron inicio a la primera temporada del programa. Desde entonces, hemos grabado más de 70 episodios en 6 temporadas, todos disponibles en las páginas de la WEB de FEB TV ⁽¹⁾ y en YouTube

Háblenos sobre la propuesta del programa.

El nombre del proyecto “Café con Luz” – nació de nuestro inmenso placer por “conversar” de preferencia con buenos amigos en una “buena prosa”. ¡Ah! ¡Y por supuesto, con un buen café! La referencia es también familiar en la historia y en la rutina de tantos brasileños, y tiene otras tantas referencias, por ejemplo, dentro del universo espírita, de nuestro querido Chico Xavier, quien también apreciaba mucho la conversación jovial, alegre y productiva con amigos, tomando un café, una merienda siempre en una antecocina sencilla, después de las tareas espíritas. Otra fuerte referencia, muy simbólica, es la de Cristo reposando ante la mesa con sus discípulos, repartiendo el alimento de manera fraternal y acogedora, hechos que están registrados en varios pasajes del Nuevo Testamento. Deseábamos mucho que las personas pudiesen percibir el ambiente espiritual acogedor, fraterno y amistoso con el que nuestros corazones se “banquetean” cuando tratamos el Evangelio de esa forma, sin “afectaciones” sin “proselitismo”, sin “interés personal”, sin la fría formalidad que tanto marcan nuestras historias milenarias, en donde el Cristo Crucificado decoraba nuestras iglesias, nuestras casas, nuestros ambientes de trabajo, pero no habitaba en nuestros corazones y era apartado de nuestro día a día. La idea fue siempre esa: amigos en el ideal del bien reunidos alrededor de una mesa, tomando un café y conversando sobre los contenidos iluminativos, frutos espirituales que el huerto infinito del Evangelio nos proporciona. Acercar al telespectador a nuestra mesa, virtualmente, y hacer que el mensaje pueda llegar al corazón de una manera natural, tal como una buena charla es capaz de realizar.

¿Ha sido influenciado por la práctica o la propuesta de alguna institución o tiene su propia iniciativa?

Como hemos dicho, fuimos inspirados por amigos del más allá y de acá del plano de la vida. Nuestra participación es el resultado de la benevolencia de la Espiritualidad superior amiga y de la confianza de otros tantos hermanos encarnados, como los amigos de FEB y FEB TV, quienes creyeron que a pesar de nuestras carencias, nuestros recursos escasos y limitados, aun así, podíamos servir a los objetivos más amplios del programa, que son la divulgación del Evangelio a través del Espiritismo, motivando a los corazones a mantenerse en los propósitos renovadores que el Cristo nos proporciona.

¿Cómo ve la calidad y la responsabilidad de los programas televisivos espíritas en general?

Todas las iniciativas de trabajo humano son factibles de tener fallas, pues todos somos aun imperfectos. Por lo tanto es natural que ocurran errores e incluso grandes errores, que la caridad bien aplicada podrá siempre ponderar. Lo que nos sentimos autorizados a hablar nos sirve primero a nosotros mismos. Como sabemos, la vanidad, el personalismo, el egoísmo, el orgullo, son los principales obstáculos al trabajo iluminativo. El desafío es ejercer la caridad en el trato de unos con otros comenzado por la tolerancia, hija directa de la comprensión de nuestros límites. Sin esto, no llegamos al perdón, imprescindible done quiera que haya relacionamiento humano. Siendo así, la Doctrina Espírita refuerza y ratifica el esclarecimiento de Cristo, cuando nos habla de “A cada uno según sus obras”. No podemos exigir a ninguna persona, institución, comunidad, o individuo que está dentro o fuera de las lides espíritas cristianas, testimonios de perfección para que el trabajo sea realizado, así como sabemos que en nosotros mismos residen las mismas aflicciones de nuestros hermanos de la jornada. El ideal es firmar el compromiso con el bien, con el perfeccionamiento del uso de los recursos, de las tareas, e ir hacia adelante reajustándonos siempre que caigamos en el error, ofreciendo a los compañeros de ideal el mismo trato que nos gustaría de recibir en las situaciones difíciles que son comunes aún en nuestro proceso evolutivo. Las nuevas tecnologías, los recursos materiales  llegarán a nuestras instituciones espíritas, en especial nuestros productores de medios, de contenidos para la TV e Internet. La diferencia, como producto de calidad, será siempre el ser humano, en este caso los espíritus comprometidos en ser mejores consigo mismos y unos con los otros, para trabajar en conjunto, mirando hacia el bien común. Después de esto, el resto es una consecuencia. ¡Buenos árboles dan buenos frutos!

¿Cuáles son las principales dificultades a superar?

Creemos mucho en la fuerza de cada Espíritu, en su ideal, en su voluntad firme de realizar y en su amor a la causa. Cuando el amor está presente en nuestras actividades, aprendemos a superar con Cristo todas las adversidades, dificultades de relacionamiento y dificultades materiales. Con toda honestidad, no creemos que el dinero y los recursos materiales sean esenciales. Éstos son muy importantes, pero lo esencial es el “quantum” del amor verdadero que está envuelto en los procesos de producción de cualquier proyecto valioso que fuera concebido. Se amamos la tarea, somos persistentes, y no temerosos. Sabremos entender, respetar y silenciar, para que en favor de una buena idea, no vayamos a caer en la paradójica lucha que agrede y falta a la caridad. Si amamos el trabajo, no nos desalentamos ante de los adversarios que siempre surgen, internos y externos, y seguimos al frente sin melindres ni penas. Sirviendo en silencio en el límite de nuestras fuerzas, sin imponer a nadie nuestras ideas ni nuestra presencia. Si nuestro amor a la tarea es posesivo (mi proyecto, mi programa, mi idea, mi papel, mi cargo…), no es amor, es personalismo, egoísmo, conflicto íntimo. Si nuestro amor es real, sabremos reconocer que, en primera instancia, el trabajo le pertenece a Dios, a Jesús, y en los trabajos de Cristo no caben las disputas por reconocimientos, posiciones, cargos y propiedad sobre proyectos. Sabremos servir en la posición que nos sea posible. Respetaremos el orden y a la disciplina de las instituciones y movimientos representativos legítimos humanos; así como cuando creemos tener la absoluta certeza de que tenemos la razón, confiaremos siempre en el segador de la verdad que es el tiempo en las manos siempre laboriosas de Dios. Si pudiéramos resumir, la gran dificultad de cualquier proyecto, así sean los de la siembra del bien como nos habla Emmanuel en “Fuente Viva”, es la dificultad impuesta por la “Cortina del Yo”.

¿Cómo ve el papel de la FEB TV y de la Federación Espírita Brasileña en la propagación de la Doctrina Espírita por medio de la TV?

Fundamental. Gracias al dedicado y abnegado trabajo de tantos colaboradores, profesionales, voluntarios, directos e indirectos, ha sido posible compartir tantas luminosas enseñanzas para miles, millones de personas, de corazones… Antes solamente había el diario impreso, el libro, que continúan teniendo su espacio y su innegable valor. Sin embargo, Internet y la TV son herramientas actuales y poderosas en la multiplicación y la divulgación de los contenidos espiritas para personas y lugares que ni siquiera imaginamos. Kardec hizo uso de todos y de los mejores recursos de la divulgación de su época. Internet, así como otros espacios democráticos, requieren ser ocupados también por las iniciativas valiosas, que tanto faltan en estos tiempos de transición en que la paradoja moral se establece y la apariencia de mal parece preponderante. La FEB TV, así como otros valiosos vehículos de comunicación espírita, requiere ser fortalecida con nuestra participación directa e indirecta, con nuestro apoyo, con nuestra divulgación. Aún no hay una cultura y hábitos de los propios espíritas de “consumo” de las producciones espíritas presentes en las redes sociales y en sites y portales como YouTube y tantos otros que mantienen presentaciones maravillosas, incluyendo en lo que atañe al criterio de la forma, de la belleza, de la producción, sonido, imagen, de arte… Pienso que la difusión de los contenidos por Internet es un camino natural. Necesitamos no abdicar de los valores espirituales que dirigen nuestro trabajo y usar de la mejor forma posible todo recurso legítimo que estuviera a nuestro alcance. La alerta es nunca perdernos en la forma, evitando colocar el contenido en segundo plano. La fuerza de la divulgación de los ideales verdaderos y constructivos no se establece sólo en la superficie…

En su percepción, ¿qué se necesita mejorar en la programación espírita para TV y en el perfeccionamiento de los programas que ya existen?

Con toda sinceridad, me considero muy incipiente y sin conocimiento profesional ni técnico de un área tan compleja y fuera de mi formación profesional. Nuestra participación en el mundo de la TV es un “atrevimiento” de nuestra parte. Lo que nos falta en talento y experiencia, tratamos de compensarlo con inmenso amor en la tarea y con nuestra dedicación. Como telespectador, creo que sentimos la falta de escuchar y de ver testimonios de historias reales, donde los personajes y sus interlocutores, a despecho de la forma del programa, hablen con absoluta fuerza de verdad, de quien cree y trata de vivenciar el contenido del que se hacen portadores y divulgadores, demostrando de innumerables formas y maneras – que la creatividad y la capacidad creativa del uso de la TV proporciona – que el contenido espírita es realmente Revelación Divina y, por lo tanto, tiene aplicación directa en todos los sectores de nuestras vidas. Los programas, las películas, los documentales, las transmisiones de las conferencias requieren vibrar y resonar en nuestros corazones por el testimonio de aquellos que realmente procuran vivir el mensaje que desean divulgar. Esto vale para todos los involucrados, no solo para los que están al frente de las cámaras, sino a todos los involucrados en cada etapa de la producción de contenidos para los medios. Todo requiere llegar más y mejor a todos los públicos, ofreciendo con la calidad técnica disponible y posible esta “Agua Viva”  de la que Cristo es la fuente y que tenemos convicción de que saciará la sed del alimento espiritual de la Humanidad.     

¿Cuáles son sus planes en relación a “Café con Luz”?¿Pretende continuar produciéndolo?

Esto no depende solamente de nosotros. “Café con Luz” es un programa de nuestra querida FEB TV, que tiene entre sus decisiones el de evaluar periódicamente varios temas, varios puntos, para decidir el qué, cómo, dónde y cuándo producirá y divulgará sus productos. Lo que tenemos que decir por ahora es que nuestro corazón estará siempre agradecido por la oportunidad sin igual de haber aprendido tanto con todos los que ayudaron e hicieron de “Café con Luz”  una forma más de hacer llegar a los corazones de nuestros hermanos el mensaje de Jesús. Ayudaremos hoy y siempre que nuestras posibilidades fueran mínimamente satisfactorias para cualquier trabajo y en cualquier sector de trabajo. ¡Siempre con Kardec, siempre con Jesús!

Sus palabras finales.
Agradecemos a todos nuestros amigos, hermanos espíritas y no espíritas, que comparten con nosotros en lo que concierne a nuestra inmensa carencia por vivir el mensaje de Amor y la necesidad de comunión con Dios para nuestra victoria espiritual. Que nuestros hermanos encuentren la alegría de vivir en la alegría del servicio del bien, que puede ser realizado en las grandes y en las pequeñas acciones. Que nuestro objetivo mayor sea el de aprender a amar, redefiniendo nuestras vidas y alcanzando la plenitud, aun cuando se en una simple conversación, tomando un cafecito y compartiendo el amor con nuestros hermanos.

⁽¹⁾ Para acceder a los programas de Café con Luz en la web use este link:https://goo.gl/SJ9KB2

 
Traducción:
Ricardo Morante
rmorante3@yahoo.com