La Revista
Espírita de
1863
Parte 9
Continuamos el estudio de la Revue Spirite correspondiente
al año 1863. El texto condensado del volumen será
presentado aquí en 16 partes, tomando como base la
traducción de Júlio Abreu Filho publicada por EDICEL.
Preguntas para el debate
A. Espíritu golpeador, ¿es lo mismo que Espíritu tiptor?
B. El autoanálisis, ¿es importante en el proceso
evolutivo del ser humano?
C. ¿Qué distingue al Espiritismo de las demás doctrinas
filosóficas?
Texto para la lectura
82. El “Presupuesto del Espiritismo o Explotación de la
Credulidad Humana” es el título de un folleto publicado
en Argel, en el que el autor presenta números
fantasiosos para decir que Allan Kardec se embolsaba una
renta anual de 38 millones de francos. Estos son algunos
ejemplos del absurdo: la Sociedad Espírita de París, que
jamás tuvo 100 socios, tendría 3,000 asociados y la Revue
Spiritecontaría con 30,000 suscriptores. El efecto
entre los espiritistas fue provocar una enorme carcajada
y en los demás, despertar el deseo de conocer al nabab
que se hizo rico con el Espiritismo. (PP.
173 a 180)
83. El Sr. Sabô, de Burdeos, cuenta que dos fábulas de
origen mediúmnico fueron afortunadas en el concurso
anual promovido por la Academia de los Juegos Florales
de Toulouse, en el que se inscribieron 68 concursantes.
Una – titulada “El León y el Cuervo” – obtuvo el primer
premio; la otra recibió una mención honrosa. El autor
desencarnado fue el Espíritu familiar del Sr. T.
Jaubert, vice-presidente del Tribunal Civil de
Carcassone quien, evidentemente, no informó al jurado
sobre el origen mediúmnico de sus dos trabajos. Las
fábulas fueron escritas por medio del lenguaje
alfabético de los golpes. (PP.
180 a 183)
84. En otra carta, el Sr. Sabô relata una experiencia
mediúmnica realizada por él, siendo médium el Sr.
Jaubert. El Sr. Sabô hizo, a pedido del médium, la evocación
mental de un Espíritu y he aquí que apareció su difunta
esposa, fallecida a los 22 años de edad, de nombre
Felicia, que Jaubert no había conocido. Comentando el
hecho, Kardec hizo una única observación: al título de
golpeador dado al Espíritu que trabaja con el Sr.
Jaubert. El vocablo golpeador es más apropiado cuando se
refiere a una de las clases que consta en la escala
espírita, en la categoría de “Espíritus imperfectos”.
Como el objetivo del Espíritu familiar del Sr. Jaubert
es serio, Kardec prefiere llamarlo Espíritu tiptor,
término que se refiere al lenguaje de la tiptología. (PP.
185 a 188)
85. En la sección de disertaciones espíritas, la Revue transcribe
tres mensajes de origen mediúmnico. En el primero, La
Fontaine dice que muchas veces lo que impide que nos
corrijamos un defecto es, ciertamente, que no percibimos
que lo tenemos. Él propone entonces el autoanálisis, el
conocimiento de nosotros mismos, para que tengamos éxito
en este campo. El segundo, sin identificación de autoría
y recibido en Viena, destaca el valor de la amistad y
dice que la oración eleva el Espíritu del hombre hacia
Dios, transportándolo a un estado de paz que el mundo no
puede ofrecer. El tercero, firmada apenas por un
filósofo de otro mundo, dice que el Espiritismo es obra
de Dios y, por eso, tiene asegurado un brillante futuro,
cuando gracias a su benéfica influencia haya en la
Tierra la concordia y la fraternidad que él proclama.
(PP. 191 a 194)
86. Un interesante artículo sobre el sonambulismo abre
el número de julio y, en él, el Codificador reproduce la
carta de un distinguido médico de Tarn, que afirma que
ciertos fenómenos ligados al sonambulismo prueban con
claridad la existencia del alma y su acción a distancia,
independiente del cuerpo físico. Kardec
también comenta el asunto. (PP. 197 a 200)
87. La Revue transcribe dos pedidos de admisión
formulados al presidente de la Sociedad Espírita de
París, para mostrar el nivel consciencia y el carácter
de los que se adhieren a las ideas espíritas a través de
la lectura y del estudio. En las dos cartas, ambos
escritores hablan del efecto que la simple lectura de El
Libro de los Espíritusprodujo en sus vidas.
Comentando el asunto, Kardec afirma que la Sociedad
Espírita de París solo acoge a gente seria y que allí
ninguno de los médiums recibe retribución. En cuanto a
los miembros corresponsales y honorarios, no se les
impone ninguna carga financiera, puesto que solo los
médiums titulares y asociados colaboran para costear los
gastos de la Sociedad. (PP.
200 a 204)
88. La última invención para intentar ridiculizar al
Espiritismo surgió en la Sala Robin, en el Boulevard du
Temple, donde aparecen espectros y fantasmas
impalpables, imitando las apariciones espíritas. El
periódico Independence belge, hablando sobre este
nuevo truco escénico, exclamó: “He aquí la religión del
Sr. Allan Kardec yéndose a pique. ¿Cómo va el
Espiritismo a salir de ésta?” Kardec dice que debe haber
una mano de los Espíritus en ese movimiento, porque esos
recursos, aliados a la virulencia de los sermones,
terminan por producir el efecto contrario al que los
detractores del Espiritismo desean. (PP.
204 a 206)
89. Un corresponsal de Burdeos, mencionando el hecho que
ocurrió con su hermana en la pequeña ciudad de B...,
donde era difícil encontrar a alguien para conversar
sobre Espiritismo, muestra el efecto que cuatro sermones
ofrecidos por los hermanos carmelitas tuvieron en la
población de esa ciudad. El resultado de los ataques –
al llamar a los médiums poseídos del demonio que solo
obran por interés – fue que, los días siguientes, en
toda la ciudad solo se hablaba del Espiritismo y todo el
mundo quería saber más, hecho que hizo que surgiesen
nuevos adeptos donde no había prácticamente ninguno.
(PP. 207 y 208)
90. En Constantinopla, según una carta enviada a la Revue por
el abogado Repos Filho, presidente de la Sociedad
Espírita local, los libros espíritas, ni bien llegan a
los libreros, son vendidos inmediatamente. (P. 209)
91. Según el Sr. Repos Filho, un cuadro dibujado
mediúmnicamente por su amigo y cofrade Paul Lombardo fue
admitido en la Exposición nacional otomana con esta
inscripción: “Dibujo mediúmnico. Ejecutado por el Sr.
Paul Lombardo, de Constantinopla, que desconoce las
artes del dibujo y de la pintura”. Comentando ambas
noticias, Kardec dice que el Espiritismo tiene un
carácter que lo distingue de todas las doctrinas
filosóficas: - el de no tener un único foco, de no
depender de la vida de ningún hombre. Si lo perjudican
aquí, él surge allí. Allí está su fuerza. (PP. 209 a
211) (Continúa
en el próximo número.)
Respuestas a las preguntas
A. Espíritu golpeador, ¿es lo mismo que Espíritu tiptor?
No. El
Sr. Sabô hizo la evocación
mental de un Espíritu y he aquí que apareció su difunta
esposa, que el médium no había conocido. Su comunicación
se hizo por golpes. Comentando el hecho, Kardec hizo una
observación al título de golpeador dado al Espíritu
comunicante afirmando que el vocablo golpeador es más
apropiado cuando se refiere a una de las clases que
consta en la escala espírita, en la categoría de
“Espíritus imperfectos”. Como el objetivo del Espíritu
que allí se comunicó fue serio, Kardec prefiere llamarlo
Espíritu tiptor, término que se refiere al lenguaje de
la tiptología. (Revue
Spirite de 1863, pp. 185 a 188.)
B. El autoanálisis, ¿es importante en el proceso
evolutivo del ser humano?
Sí. Según el Espíritu de La Fontaine, lo que impide
muchas veces que nos corrijamos un defecto es,
ciertamente, que no percibimos que lo tenemos. Él
propone entonces el autoanálisis, el conocimiento de
nosotros mismos, para que tengamos éxito en este campo.(Obra
citada, págs. 191 a 194.)
C. ¿Qué distingue al Espiritismo de las demás doctrinas
filosóficas?
Lo que distingue al Espiritismo de todas las doctrinas
filosóficas es el hecho de no tener un único foco, de no
depender de la vida de ningún hombre. Si lo perjudican
aquí, él surge allí. Allí está su fuerza. (Obra citada,
pp. 209 a 211.)
Traducción:
Maria Reyna
mreyna.morante@gmail.com