Entrevista

por Orson Peter Carrara

Niño evangelizado, adulto consciente y feliz

Sonia Maria Franco Bossolani (foto),espírita desde 1990, natural de Araraquara (SP) en donde reside, es Gestora Social. Está vinculada al Centro Espírita y Asistencial Paulo de Tarso, en el que integra el Consejo Fiscal. De sus reflexiones sobre la transformación del planeta, a partir de la voluntad y el amparo a los niños, sus respuestas son valiosas herramientas para ser usadas por el lector.

¿Cómo considera la contribución del contenido espírita a la transformación del actual estado moral del planeta?

La doctrina espírita es el mejor camino que tenemos en este momento para la regeneración planetaria. Ella trae en su esencia las enseñanzas de Cristo y la materialización de Su promesa contenida en Juan, XIV de 15 a 17 y 26, sobre la llegada del Consolador Prometido, viniendo a enseñar todas las cosas y a recordarnos todo lo que Jesús nos dijo. Por lo tanto, vivenciar la doctrina espírita es vivir con Jesús.

Considerando que un cambio general comienza por el cambio individual, ¿cómo se entiende esto en la práctica?

A través de la transformación de conducta que deriva de la reforma íntima. Observo en el ambiente cotidiano en el que vivo que la gente es más amorosa. Desde hace 20 años trabajo en una ONG con niños provenientes de familias de bajos ingresos y vulnerabilidad social. Las transformaciones en este período, al que no considero muy largo, fueron significativas. Al principio teníamos poca información y factores como enfermedades graves, drogas, violencia doméstica no estaban tan cercanas a las familias como hoy. Aun así, se observa que los niños son más cariñosos, más afectivos, aunque demuestren cierta violencia derivada de sus experiencias. Trabajando y actuando amorosamente en nosotros y después con todas las personas que nos rodean, lograremos, aunque sea a paso lento, esta transformación individual y colectiva.

¿Nos estamos volviendo mejores personas?

A pesar del enorme volumen de hechos tristes que vemos a través de los medios de comunicación, tengo una gran confianza en que nos estamos convirtiendo en mejores personas. Constantemente escucho que todos somos oportunistas y corruptos y que todo lo que está ocurriendo en nuestro país y en el mundo se debe a la sociedad y no a una parte de ella. Yo no generalizo. El bien no hace alarde, no quiere aparecer, pero camina por todas partes y está en todas las personas. Jesús actuó con valentía, pero con gran humildad y este es el ejemplo de cómo actuar en el bien.  Creo que la proporción de personas buenas supera las malas, pero ellas no están en evidencia. La transformación del planeta en un momento dado hará que el bien siga actuando de forma natural, pero más intensamente, en todas las naciones, intimidando al mal en su arrogancia, quitándole las fuerzas. Nuestro gobernador es Jesús. ¿Quién duda de eso?

¿Podemos tomar ejemplos de la vida cotidiana?

En un aspecto más amplio, vemos que la Justicia brasileña está siendo hecha con más respeto a la igualdad para con todos los ciudadanos y de una manera más honesta. Otros ejemplos son los miles de investigadores universitarios en todas las áreas, poco valorados, pero que trabajan por ideales nobles para el avance de la ciencia y la tecnología. También podemos mencionar a las personas que devuelven las carteras o bolsas con dinero encontradas por personas que tendrían varias razones para no devolverlos, por sobrevivir con salarios magros, con deudas necesarias para esa supervivencia y, en muchos casos, no teniendo cómo pagarlas. El aumento de las ONG para cuidar a los animales. Los anónimos que toman un poco de alegría y consuelo a los pacientes de los hospitales. Esta pregunta excede los límites de esta respuesta, pero creo que es importante destacar el ejemplo de las mujeres que son las  proveedoras de sus hogares, son madres, esposas o no, hijas, trabajando fuera y dentro del hogar y estudiando en la noche para mejorar sus vidas, y lo consiguen. ¿No puedo decir entonces que el mundo está mejorando?

¿Cuál es el factor más importante para el inicio de una transformación real?

Parafraseando El Libro De Los Espíritus, pregunta 909: la voluntad

¿Cuál es la mayor impedimento?

También en la pregunta 909 del El Libro De Los Espíritus somos alertados sobre el poco esfuerzo que debemos hacer y que comúnmente no hacemos para nuestra transformación real.

De sus reflexiones, ¿cuál es la más significativa en este intenso proceso de transformación individual y colectiva?

La voluntad. Hoy estamos en el mundo de las facilidades. Mi padre, a sus 80 años, acostumbra decir que no tiene nostalgia de su tiempo de niño o de joven. Apenas tenían qué comer y qué vestir. Comenzó a trabajar desde niño en la plantación con personas irritables y el rendimiento financiero era mínimo. Él dice que el mundo de hoy es mucho mejor y vive feliz porque su vida ha mejorado. Él siempre actuó con mucha voluntad, trabajo y sudor en sus conquistas y la mayor de ellas fue su crecimiento moral, en el que intento reflejarme.

De las experiencias ya vividas, ¿qué le gustaría destacar al lector?

Debemos aprovechar las oportunidades para nuestro crecimiento individual. No debemos desperdiciar nuestra encarnación. La fila es muy grande para regresar a esta escuela bendita. Los libros, conferencias, cursos, obras en la Casa Espírita son valiosas herramientas, pero no son suficientes, tenemos que ir más allá. El trabajo en favor de los semejantes favorecerá este crecimiento. La convivencia diaria nos dará la oportunidad de minimizar los defectos que cargamos y maximizará las virtudes que tenemos.

¿Algo más que le gustaría añadir?

Trabajando con niños como una oportunidad bendecida en esta encarnación, hago un llamado a todas las Casas Espíritas para que dirijan la mirada hacia ellos, inviertan en la Evangelización Infantil, que es la aplicación de la moral cristiana para los que acaban de reencarnar. A los dirigentes, a pesar de las grandes responsabilidades que tienen, que derramen su amor sobre ellos y este amor será devuelto el doble. Nuestras Casas Espiritas necesitan llenarse de niños. Ellos representan las flores con sus colores y perfumes para alegrar todo el espacio físico, por muy sencillo que sea, modificando su patrón vibratorio. Niño evangelizado, adulto consciente y feliz.

Sus palabras finales.

En este contexto, los espíritas están en constante lucha íntima para la renovación de su mundo interior y exterior. La enseñanza del Maestro que dice: "Orad y Vigilad”, añadiendo "Meditad", se convierte en una orden urgente en el momento en que estamos pasando con el propósito de lograr esta transformación moral y vamos a ser felices.

  
Traducción:
Ricardo Morante
rmorante3@yahoo.com

 

 

     
     

O Consolador
 Revista Semanal de Divulgação Espírita