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De la Génesis a la Biofísica Quántica: en tiempo
de pandemia |
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"La Ciencia está llamada a construir la verdadera
Génesis, según las Leyes de la Natureza." - Allan Kardec
(1)
"La Ciencia sin religión está manca. La religión sin la
ciencia es ciega." - Albert Einstein
En los principios de la organización de las sociedades
humanas, religión y ciencia se confundían. Los libros
sagrados eran la única fuente de las respuestas y
esclarecimientos para todas las cuestiones, inclusive
Código de leyes civiles.
No es de extrañar que hasta hoy los núcleos religiosos
son procurados para tratamiento de salud física, a la
luz de lo sobrenatural, de la fe.
Encontramos en El Evangelio según el Espiritismo las
siguientes consideraciones de Allan Kardec: "La ciencia
y la religión no pudieron entenderse hasta hoy... se
repelían mutuamente... sería preciso algo para llenar
ese vacio... un trazo de unión que está en el
conocimiento de las leyes que rigen el mundo espiritual
y sus relaciones con el mundo corporal... mas ni eso
como en todas las cosas, hay personas que permanecen
para atrás, hasta que sean arrastados por el movimiento
general que las aplastará si quisieran resistirle al
contrario de el abandonarse". (2)
Los científicos nos han ayudado sobremanera en el
entendimiento y comprensión de los movimientos cíclicos
que vienen ocurriendo a través de los siglos.
Max Planck descubrió en 1900 que la energía es emitida
en paquetes (quantum). Y todo ocurre en frecuencia. Todo
es energía en sus diversas manifestaciones. (3)
La propuesta del pensamiento quántico es, en realidad,
mudar la percepción y la conciencia.
Las creencias, los hábitos, comportamientos, la forma
pensamiento pueden ser gatillos disparadores de ajustes
o desajustes físicos, psicológicos, espirituales.
Un comportamiento de victimización puede llevar a la
persona a desenvolver dolencias crónicas y/o
degenerativas. Por ejemplo, el cáncer, la depresión y
demás patologías que puede bajar la inmunidad, alterando
el metabolismo, favoreciendo absorción de intrusos, como
los vírus y/o frecuencias vibracionales presencias en
estado de desajustes espirituales.
Al realizar investigaciones en los Estados Unidos de
América con más de 40.000 pacientes a través de la
Resonancia Magnética, el Dr. Andrew Newberg (4),
profesor de la Universidad Thomas Jefferson, constató
que la oración y la meditación son poderosísimas en los
tratamientos de variadas patologías clínicas.
Otros investigadores de la Moffit Cáncer Center,
Florida, verificaron que los pacientes que creen en una
fuerza superior tenían más salud física que los
incrédulos.
Personas que frecuentan las misas, las casas espíritas,
templos religiosos, una vez por semana, viven 23% más y
mejor que aquellos que no cultivan ese hábito.
Los estudios concluyeron que: Creencia y fe nos vuelven
personas mejores.
Allan Kardec en la pregunta 479 de El Libro de los
Espíritus, pregunta: "¿La oración es un medio eficaz
para curar la obsesión (frecuencia)?” Los espíritus
superiores respondieron: "La oración es un poderoso
socorro en todo. Es necesario, pues, que el obsesado (la
persona) haga, a su vez, aquello que es necesario
(cambio de frecuencia) para destruir, en sí mismo, la
causa que atrae a los malos espíritus".
Físicos quánticos y estudiosos de la Psicología
Transpersonal y de la Biofísica Quántica, utilizando
instrumentos de tecnología punta, establecieron
parámetros quantitativos para medir las frecuencias de
las emociones.
La escala de patrones de David Hawkins (5) presenta
variaciones de 20 hz a más de 1.000 hz. Se nota que las
emociones de la verguenza (20hz), el estado más bajo de
conciencia del ser humano, de la culpa (30hz), de la
amargura (75hz), del miedo (100hz) se mantiene en
contracción. Al paso que las emociones del amor (528hz);
la alegría (540hz) y la paz, total transcendencia
(600hz), se encuentran en constante expansión, rumbo a
la iluminación (700hz o más) y por arriba de (1.000hz),
la iluminación final, en que la Humanidad se confunde
con la divinidad.
El lector atento podrá notar en esa observación que el
amor no es el ápice, el objetivo final. Es, sí, un
portal de acceso a un nuevo "modus vivendi" con alegría
y la paz, tan deseada y 'perseguida' por tantos. Los
Evangelios nos estimulan apuntando el amor al prójimo,
para que podamos aprender a desenvolver en nosotros la
capacidad de alcanzar esa frecuencia, distanciándonos de
otras que no nos traen ningún beneficio físico y
vibracional.
"¡Dichoso aquel que, superando su humanidad, ama con
amplio AMOR a sus hermanos en sufrimiento!" (6)
La Neurociencia explica aun el poder de la gratitud. El
sentimiento de gratitud activa el sistema de recompensa
del cerebro (Núcleo Accumbens) dando la sensación de
placer y bienestar, y libera la hormona dopamina, propia
de las personas que viven en níveles elevados de
emociones positivas, optimismo, vitalidad. La ocitocina,
también producida por la gratitud, es la hormona del
afecto, tranquilidad, apego, empatia, reduce la
ansiedad, modula la sensibilidad al miedo, la fobia, la
rabia. Es oportuno recordar que el cerebro no es capaz
de sentir al mismo tiempo la frecuencia de la gratitud y
de la infelicidad; eso nos da la claridad de que la
elección siempre estará bajo nuestra responsabilidad.
"A cada uno según sus obras." (7)
El Maestro de Lyon, al estudiar el tema felicidad e
infelicidad relativas en 'El Libro de los Espíritus',
pregunta 920, preguntando si el hombre puede gozar sobre
la Tierra de una felicidad completa, obtuvo la siguiente
respuesta: "No, ya que la vida le fue dada como prueba o
expiación. Mas depende de el amenizar sus males y ser
tan feliz como se puede ser sobre la Tierra". Y añade en
la pregunta 921 que el hombre, practicando la Ley de
Dios (que está escrita en la conciencia, L. E.621),
podrá alcanzar felicidad tan grande cuanto comporte su
existencia grosera.
Como psicólogo clínico transpersonal y terapeuta de vida
pasada, durante 27 años, atendiendo a millares de casos
clínicos, como facilitador en los descubrimientos
sorprendentes que el inconsciente trae a la luz de la
conciencia, el autor, reconoce que la evolución de la
ciencia a cada día nos ha apuntado la dirección de la
gran alianza consagrada. Como las investigaciones arriba
demuestran, las personas que buscan el ejercicio de la
Fe Religiosa, de la Meditación, del encuentro consigo
mismo, que desenvuelven una certeza de que existe una
energía superior y universal y el Ser Humano está ligado
a esta fuerza, se sienten más tranquilas y felices.
Aumentan la inmunidad en el metabolismo, ampliando las
vibraciones frecuenciales y promoviendo una longevidad
saludable. Comprenden con más claridad la importancia de
la vida en la Tierra.
Pasa así a tener sentido el propósito de cada uno de
nosotros. Es como si encontrasemos las respuestas a
aquellas preguntas que todos nosotros algún día hicimos:
¿Qué vine a hacer aquí? ¿De dónde vine, para dónde voy?
El sentimiento de seguridad es indescriptible por ser
único.
Todos nosotros, cada cual a su modo, tenemos nuestra
propia experiencia. ¡Ahí reside la belleza de la vida!
Bibliografia:
1. Kardec, Allan, A Gênese,
capítulo IV, item 3. 6ª edição, IDE, 1994.
2. Kardec, Allan, O Evangelho segundo
o Espiritismo, capítulo I, item 8, 217ª edição IDE,
1997.
3. Planck, Max, Físico Alemão, Nobel de
Física em 1918, "O Pai da Física Quântica" (1858-1947)
4. Newberg, Dr. Andrew & Waldman, Mark, Como
Deus pode mudar sua mente, ed. Prumo.
5. Hawkins, Dr. David R. – Escala de
David Hawkins.
6. Lázaro, Paris, 1862, O Evangelho
segundo o Espiritismo, capítulo XI, ítem 8.
7. Bíblia Sagrada, Mateus, 16:27, João
de Almeida, S.B.B. 1999.
Arleir Francisco Bellieny es psicólogo
clínico, expositor espírita internacional y miembro
fundador de la Asociación Médico-Espírita de Rio de
Janeiro y de la Asociación Médico-Espírita Internacional
– AME Internacional.