Espiritismo para
los niños

por Marcela Prada

 

Tema: Cooperación


El mejor vino


En los Alpes italianos existía una pequeña aldea que se dedicaba al cultivo de uvas para la producción de vino. Una vez al año, ahí se realizaba una gran fiesta para conmemorar el éxito de la cosecha.

En esa fiesta, siguiendo la tradición, cada productor de vino, habitante de la aldea, traía una garrafa de su mejor vino y la vertía en un gran barril que quedaba en la plaza central. Todos los hacían así y el resultado era un barril lleno de vino de excelente calidad. Era un gesto de gratitud por la producción de ese año y de compartir las bendiciones recibidas con los vecinos y amigos.

Sin embargo, ese año, uno de los habitantes pensó:

- ¿Por qué debo llevar una garrafa de mi vino más puro? Llevaré agua dentro de la garrafa. En medio de tanto vino, el mío no hará falta. ¡Y si el vino mezclado no está tan bueno, jamás sabrán que fui yo quien colocó agua!

Y así lo hizo.

En el auge de la fiesta, como era costumbre, todos se reunieron en la plaza con sus tazas para tomar un trago de ese vino de primera calidad.

Era para ser un momento de gran satisfacción, sin embargo, al abrir la llave del barril, un silencio envolvió a la multitud. Del barril solo salió pura agua. ¡Fue una gran decepción! Nadie sabía qué decir. Los productores miraban para abajo.

Entonces todos entendieron lo que había pasado. Todos pensaron de la misma manera: “si yo no colaboro, nadie lo va a notar”.

Pero sucedió lo contrario. Todos fueron desenmascarados.

La fiesta terminó y las personas se fueron a sus casas tristes y avergonzadas.

Pero, como los errores y las experiencias negativas también pueden ser aprovechadas para bien, lo que sucedió ese año fue una bella lección para todos.

Al año siguiente, y en los que le siguieron, ya nadie pensó en actuar de esa manera. Los habitantes habían aprendido que la colaboración de cada uno es lo que hace el resultado final. Debemos siempre actuar bien de nuestra parte, y no simplemente esperar que los otros lo hagan por nosotros.

Todos volvieron a colaborar con sus mejores vinos y la fiesta volvió a ser muy agradable y feliz.


(Adaptado del texto del sitio web Passatempo Espírita.)


 

Traducción:
Carmen Morante
carmen.morante9512@gmail.com


 


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