Tema: Felicidad en el Hogar
Construyendo la felicidad
Érase una vez alguien que ganó un libro. Y al abrir ese
libro, conoció un mundo nuevo.
Era un libro que hablaba sobre Jesús y sus enseñanzas.
Hablaba sobre amor, bondad, ayuda y tantas cosas buenas,
que esa persona parecía haber encontrado una nueva
realidad.
Y, entonces, lleno de esperanzas de ser feliz, decidió
salir en búsqueda de todo lo que había leído en esas
páginas.
Quería encontrar el lugar donde hubiera tanto cariño
entre las personas como oportunidades para que todos
sean útiles unos a otros. Donde aprendiera lecciones
importantes que quedaran marcadas para toda la vida.
Un lugar donde pudiera ejercitar todos los días las
virtudes que nos conducen a la felicidad y donde la
felicidad, más que en cualquier otro lugar, tuviera la
oportunidad de nacer, como el Sol, todos los días.
Solo que, después de algún tiempo, se dio cuenta de que
ese lugar no estaba cerca, esperándole. Y descubrió que
cada criatura es quien hace el mundo en el que vive,
feliz.
Solo necesitaba construir el suyo, con sus sueños, con
sus sentimientos, con su dedicación, con pequeños gestos
de consideración.
Entonces comenzó a realizar todo lo que deseaba en su
mundo y, cuando consiguió construirlo, comprendió lo que
era. Era su hogar. Un hogar feliz.
Adaptación de texto de Rita Foelker,
publicado en el Blog “El arte en la evangelización
espírita”.
Traducción:
Carmen
Morante
carmen.morante9512@gmail.com
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