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Donación de organos y
trasplantes en una perspectiva
cristiana |
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En las prácticas médicas de todas las especialidades, el
trasplante de órganos es la que demuestra con mayor
claridad la estrecha relación entre la muerte y la nueva
vida, el renacimiento de las cenizas como Fénix: el
mitológico pájaro símbolo de la renovación del tiempo y
de la vida después de la muerte. (1)
La temática "donación de organos y trasplantes" es
bastante contemporánea en el escenario terreno. Sobre el
asunto las informaciones instructivas de los
Benefactores Espirituales no son abundantes. El
incitante Proyecto Genoma, las investigaciones sobre
células-tronco embrionarias y otras señalizan el alcance
de la ciencia humana.
Los trasplantes, en épocas pasadas repletas de casos de
rechazo, se volvieron prácticas actuales de
recomposicion orgánica. El esmero "in-vivo" de
experiencias buscando la regeneración de células y la
perspectiva de mejoría de vida caminan adelante, en que
pesen las investigaciones ensayaron, aun, las iniciadas
marchas. Eso vuelve favorable la expectativa de la
ciencia contemporánea.
Con todo, el recelo del desconocido gravita en el
imaginario de muchos. Algunos espíritas se niegan a
autorizar, en vida, la donación de sus propios órganos
después de la desencarnación, alegando que Chico Xavier
no era favorable a los transplantes.
¡Eso no es verdad! Forzoso esclarecer que Chico Xavier,
cuando afirmó “mí mediumnidad, mi vida, dediqué a mi
familia, a mis amigos, al pueblo. Mi muerte es mía. Yo
tengo este derecho. Nadie puede meterse con mi cuerpo;
el debe ir para la madre Tierra", lo hizo porque cuando
aun encarnado Chico recibió varias propuestas
[impropias] para que su cerebro fuese estudiado después
de su desencarnación. De ahí el comprensible recelo de
que su cuerpo fuese profanado en ese sentido.
No podemos olvidar que, si hoy somos potenciales
donadores, mañana podremos ser o nuestros familiares y
amigos potenciales receptores. "¡Para la mayoría de las
personas, la cuestión de la donación es tan remota y
distante en cuanto a la muerte. Pero para quien está
esperando un órgano para trasplante, ella significa la
única posibilidad de vida!" (2)
Joanna de Ângelis, sabiendo de esa importancia, resalta
"(...) Verdadera bendición, el trasplante de órganos
concede oportunidad de proseguimiento de la existencia
física, en la condición de moratoria, a través de la
cual el Espíritu continúa el periplo orgánico. Al final,
la vida en el cuerpo es medio para la plenitud - que es
la vida en sí misma, agitada y real" (3)
En una entrevista a la TV Tupi en agosto de 1964, Chico
Xavier comenta que el trasplante de órganos, en la
opinión de los Espíritus sabios, es un problema de la
ciencia muy legítimo, muy natural y debe ser llevado
adelante. Los Espíritus, según el médium de Uberaba, no
creen que el trasplante de órganos sea contrario a las
leyes naturales. Pues es muy natural que, al
desprendernos del cuerpo físico, vengamos a donar los
órganos prestantes a compañeros necesitados de ellos,
que puedan utilizarlos con provecho. (4)
La donación de órganos para trasplantes es perfectamente
legítima. Divaldo Franco certifica: si la misericordia
divina nos otorga una organización física sana, es justo
y válido, después de habernos utilizado de ese
patrimonio, ofrecerlo, gracias a las conquistas valiosas
de la ciencia y de la tecnología, a los que vinieron en
carencia a fin de continuar la jornada. (5)
No hay, también, reflejos traumatizantes o inhibidores
en el cuerpo espiritual, en contrapartida a la
mutilación del cuerpo físico. El donador de ojos no
volverá ciego al Más Allá. Si así fuese, ¿qué sería de
aquellos que tienen el cuerpo consumido por el fuego o
desintegrado en una explosión? (6)
¿Cuándo se puede precisar que una persona esté realmente
muerta? Conforme la American Society of
Neuroradiology, la muerte encefálica es el estado
irreversible de cesación de todo el encéfalo y funciones
neuronales, resultante de edema y fuerte destrucción de
los tejidos encefálicos, a pesar de la actividad
cardiopulmonar puede ser mantenida por avanzados
sistemas de soporte vital y mecanismo de ventilación”.
(7)
La gran confusión del asunto es la muerte encefálica, en
la vigencia de la cual órganos o partes del cuerpo
humano son removidos para la utilización inmediata en
enfermos de ellos necesitados. Estar en muerte
encefálica es estar en una condición de parada
definitiva e irreversible del encéfalo, incompatible con
la vida y de la cual nadie jamás se recupera. (8)
Habiendo muerte cerebral, verificada por exámes
convencionales y también apoyada en recursos de moderna
tecnología, apenas los aparatos pueden mantener la vida
vegetativa, a veces por tiempo indeterminado.
Es en ese estado que se verifica la posibilidad del
donador de órganos "morir" y solo entonces sus órganos
pueden ser aprovechados – ya que órganos sin irrigación
sanguínea no sirven para transplantes. ¿Sería la
eutanasia? Evidentemente que caracterizar el hecho como
tal carece de argumentación científica (...) para
condenar el trasplante de órganos: la eutanasia de modo
alguno se encajaría en esos casos de muerte encefálica
comprobada. (8)
La medicina, en todo el mundo, tiene con certeza que la
muerte encefálica, que incluye la muerte del tronco
cerebral (10) solo tendrá constatación a través de dos
exámes neurológicos, con intervalo de seis horas, y uno
complementario. Así, cuando fuera constatada la cesación
irreversible de la función neural, ese paciente estará
muerto, para la unanimidad de la literatura médica.
Cuestión que también a menudo es levantada es el rechazo
del organismo después de la cirugía. Chico Xavier
nuevamente nos viene al auxilio, explicando: André Luiz
considera el rechazo como un problema claramente
comprensible, pues el órgano del cuerpo espiritual está
presente en el receptor. El órgano periespiritual
provoca los elementos de la defensa del cuerpo, que los
recursos inmunológicos en un futuro próximo,
naturalmente, van a asustar o cohibir. (11)
Especialistas, a partir de 1967, desenvolvieron varias
drogas inmunosupresoras (ciclosporina, azatiaprina y
corticoides), para reducir la posibilidad de rechazo,
pasando entonces los receptores de órganos a tener una
mayor sobrevida. (12)
Estadísticamente, lo que hay es que la taxa de
prolongamiento de vida de los trasplantes es
extremamente elevada. Eso gracias no solo a las técnicas
médicas, siempre perfeccionando, sino también por los
esquemas inmunosupresores que se desenvolvieron y se
ampliaron considerablemente, existiendo actualmente
esquemas que llevan a cero por ciento (0%) el rechazo
celular agudo en la fase inicial del transplante, que es
cuando ocurren. (13)
André Luiz explica que cuando la célula es retirada de
su estructura formadora, en el cuerpo humano, yendo
laboratorialmente para otro ambiente energético, ella
pierde el comando mental que la orientaba y pasa, de esa
forma, a individualizarse; al ser implantada en otro
organismo [por trasplante, por ejemplo], tenderá a
adaptarse al nuevo comando [espiritual] que la
revitalizará y a seguir coordinará su trayectoría. (14)
Condición esa corroborada por Joanna de Ângelis cuando
expone: (...) transferido el órgano para otro cuerpo,
automáticamente el periespíritu del encarnado pasa a
influenciarlo, moldeandolo a sus necesidades, lo que
exigirá del paciente beneficiado la urgente
transformación moral para mejor, a fin de que su mapa de
pruebas sea también modificado por su renovación
interior, generando nuevas causas desencadenantes para
la felicidad que busca y tal vez aun no merezca. (15)
Los Espíritus afirmaron a Kardec que el desligamiento
del cuerpo físico es un proceso altamente especializado
y que puede demorar minutos, horas, días, meses. (16)
Aunque con la muerte física no haya más cualquier
vitalidad en el cuerpo, aun así hay casos en que el
Espíritu, cuya vida fue toda material, sensual, queda
unido a los despojos, por la afinidad dada por él a la
materia. (17)
Todavía, recordemos la situación que ocurre todos los
días en las grandes ciudades: la práctica de la
necropsia, exigida por fuerza de la Ley, en los casos de
muerte violenta o sin causa determinada: se abre el
cadáver, de la región esternal hasta el bajo vientre,
exponiéndose las vísceras toracoabdominales. (18)
No se puede perder de vista la cuestión del mérito
individual. ¿Estaría el destino de los Espíritus
desencarnados a merced de la decisión de los hombres en
retirarles los órganos para trasplante, en cremarles el
cuerpo o en cortarles las vísceras por ocasión de la
necrópsia?! ¡El buen sentido y la razón gritan que eso
no es posible, por cuanto sería admitir la justicia del
acaso y el acaso no existe! (19)
En síntesis, la donación de órganos para trasplantes no
afectará el espírito del donador, excepto si acreditamos
ser injusta la Ley de Dios y estar en el Orbe a la
deriva de Su Voluntad. Recordemos que en los Estatutos
del Padre no hay espacio para la injusticia y el
trasplante de órganos (hazaña de la ciencia humana) es
valiosa oportunidad de entre tantas otras colocadas a
nuestra disposición para el ejercicio del amor.
Referências bibliográficas:
1- Mário Abbud Filho Ex-Presidente da Associação
Brasileira de Transplantes de Órgãos. Presidente da
Sociedade de Medicina e Cirurgia de São José do Rio
Preto. Membro da American Society Transplant
Physician. Membro da International
Transplantation Society, disponível acesso em
12/04/2005
2- In Doação de Órgãos e Transplantes, de
Wlademir Lisso / Cleusa M. Cardoso de Paiva, disponível
acesso em 15/04/2004
3- Franco, Divaldo Pereira. Dias Gloriosos,
ditado pelo Espírito Joanna de Angelis. Salvador/Ba: Ed.
LEAL, 1999, Cf. Cap. Transplantes de Órgãos
4- Publicada na Revista Espírita Allan Kardec,
ano X, n°38
5- Franco, Divaldo Pereira. Seara de Luz,
Salvador: Editora LEAL [o livro apresenta uma série de
entrevistas ocorridas com Divaldo entre 1971 e 1990.]
6- Simonetti, Richard. Quem tem medo da morte? -
São Paulo /SP: Editora Lumini ,2001
7- In: "Dos transplantes de Órgãos à Clonagem", de Rita
Maria P. Santos, Ed. Forense, Rio/RJ, 2000, p. 41
8- Bezerra, Evandro Noleto. Transplante de Órgãos na
Visão Espírita, publicado na Revista Reformador-
outubro/1998
9- Idem
10- O tronco cerebral, e não o coração, é reconhecido
como o organizador e "comandante" de todos os processos
vitais. Nele está alojada a capacidade neural para a
respiração e batimentos cardíacos espontâneos; sem
tronco ninguém respira por si só.
11- Cf. Revista Espírita Allan Kardec, ano X,
n°38
12- Folha de S. Paulo, A3, "Opinião", 15 de maio
de 2001
13- Entrevista com o Prof. Dr. Flávio Jota de Paula
Médico da Unidade de Transplante Renal do HC/FMUSP. 1º
Secretário da Associação Brasileira de Transplante de
Órgãos (ABTO). Diretor da I Mini Maratona de
Transplantados de Órgãos do Brasil. Publicado em Prática
Hospitalar ano IV n º 24 nov-dez/2002
14- Xavier, Francisco Cândido. Evolução em dois
mundos - Ditado pelo Espírito André Luiz. 5ª Ed. Rio
de Janeiro, RJ: Ed FEB, 1972, cap. "Células e Corpo
Espiritual"
15- Franco, Divaldo Pereira. Dias Gloriosos,
ditado pelo Espírito Joanna de Angelis. Salvador: Ed.
LEAL, 1999
16- Kardec, Allan. O Livro dos Espíritos, RJ: Ed
FEB/2003, questão n° 155, Cap. XI.
17- Kühl Eurípedes DOAÇÃO DE ÓRGÃOS TRANSPLANTES
Entrevista Virtual disponível acesso em 24/04/2005
18- Cf. Bezerra, Evandro Noleto. Transplante de
Órgãos na Visão Espírita, publicado na Revista
Reformador- outubro/1998
19- Bezerra, Evandro Noleto. Transplante de Órgãos na
Visão Espírita, publicado na revista Reformador-
outubro/1998.