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“La gran escuela”
y los educadores sin
educar |
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La educación pasa por profundas transformaciones. En el
afán de mejorar el aprendizaje, la pedagogía ha
desenvuelto métodos y construído recursos para mejorar
la comprensión de aquello que es el centro del
aprendizaje y que, consecuentemente, colocará el
aprendizaje en el centro de la solución, facultándole el
uso de esas herramientas para el desenvolvimento de la
inteligencia.
Desenvolver la inteligencia es importante para el
progreso del espíritu, porque permite, primero, que
aquel que desenvuelve la inteligencia auxilie a su
prójimo. Enseguida, para que el propio espíritu se
desenvuelva más rápido, como puede ser interpretado en
la pregunta 898 formulada por Allan Kardec en El Libro
de los Espíritus.
Por otro lado, el desenvolvimiento de la inteligencia,
aun no es garantía de desenvolvimiento ético-moral. El
individuo puede poseer maestría y doctorado y aun así
obrar como un troglodita.
Hay siempre que evocarse la figura del buen sentido y
por eso recurrimos al discurso de Camille Flammarion,
cuando profirió, teniendo los despojos de Kardec a sus
pies, en el Cementerio de Montmartre (solo después fue
llevado para el Père-Lachaise), el siguiente
pensamiento: “Nadie es feliz en la Tierra, donde muchos
afectos son despedazados, donde muchas almas han sido
envenenadas por el escepticismo.”
Muchos educadores, cada uno en su profesión,
desenvolvieron la inteligencia, adquirida con mucho
esfuerzo las cualificaciones académicas importantes para
la realización de sus actividades (maestría y
doctorado), sin embargo, con el avance en la comprensión
de los métodos positivistas, se dejaran llevar y por aun
ser espíritus vacilantes, se perdieran en las
burocracias del pensamiento materialista, preponderante
en las universidades. Con eso, la sensibilidad a las
enseñanzas morales y hasta incluso el respeto a las
diferencias se perdieron, reforzando el pensamiento de
Flammarion, de que nadie es feliz en la Tierra. Se
vuelven personas tristes, aquellos que creen que la
Ciencia embrutece a las personas. Lo que embrutece es la
predisposición del espíritu y combatirlo es fundamental.
Frase atribuida a Louis Pasteur traduce con provecho ese
pensamiento: “cuanto más estudio la naturaleza, más
quedo maravillado con las obras del Creador. La Ciencia
me aproxima a Dios.”
Fue así, con la comprensión delante de la diversidad, de
la delicadeza intelectual de muchos catedráticos de
valor, pues reconocemos los esfuerzos emprendidos para
alcanzar sus meritosos títulos, que interpretamos un
post en red social al respecto de “Chico Xavier y
África”. Son personas tristes, que viven en el planeta
Tierra perdidas entre el protagonismo de la ignorancia y
el anonimato en las reglas de Cristo.
El autor de la publicación parece escribir, en su post,
así interpretamos, con un tono irónico, junto a la falta
de respeto por el trabajo producido por Francisco
Cándido Xavier, cuando lo califica como “el santo de los
espíritas”. Soy espírita y nunca vi a Chico Xavier como
santo, luego, el “santo de los espíritas” no es una
calificación verdadera. Conocemos muchos otros que
estudian la obra de Chico Xavier, conocen profundamente
y no por eso ven a Chico Xavier como santo. ¿Existen
espíritas que creen ser Chico Xavier un “santo”? No
creo. Espírita no. Santo es una definición de otra
religión. En el Espiritismo se aprende que existen
espíritus superiores y lo que los caracteriza y
diferencia de los demás es la evolución moral.
La evolución moral es resultado de las reencarnaciones.
Por eso, es posible comprender en el texto criticado,
“la gran escuela”, que el espíritu Emmanuel, por la
psicografía de Francisco Cândido Xavier, hizo un recorte
en pueblos primitivos, para exponer que, en cada época
de la evolución en que la humanidad se encuentra, la
reencarnación es un “premio por la ocasión de
aprendizaje”.
Aunque el autor del post pueda ser clasificado entre
aquellos que no son felices en la Tierra, es posible
comprender que el pensamiento de él es el retrato de un
momento delante de la evolución. ¿Quién de nosotros no
diverge o dudó o hasta se atrevió a obrar con
escepticismo delante de trabajos que tuvieron como base
de verdad, aquello que comprendemos de forma diferente?
Si Emmanuel trajese como ejemplo pueblos primitivos en
Europa, tal vez fuese completamente ignorado por el
autor del post. Además, se percibe en la actualidad del
movimiento espírita, personas leyendo obras en busca de
“errores doctrinarios” con el propósito de invalidar el
trabajo de quien quiera que sea. Cuidado:
¡investigadores serios que investigaron el Espiritismo
en el afán de desenmascarar la Doctrina Espírita, se
vuelven sus mayores divulgadores! Volviendo a los
pueblos primitivos, en la Revista Espírita de 1867, hay
un texto de Camille Flammarion (¡mira que “coincidencia”
Flammarion citado nuevamente!) que habla sobre los
salvajes primitivos desnudos, habitantes de las
latitudes boreales, de Dinamarca, de Galia, y de
Helvécia (región de Europa Central entre los Alpes
suizos y la cordillera de Jura, según Wikipedia).
Pueblos primitivos de Europa, con el pasar del tiempo,
evolucionaron para las sociedades que existen en la
actualidad. La sociedad que existe en la actualidad de
Europa es el resultado de la reencarnación de espíritus
que posiblemente ya reencarnaron en África, Ásia,
Oceanía y Américas.
La sociedad actual de las Áfricas es resultado de la
reencarnación de espíritus que posiblemente ya
reencarnaron en Europa, Ásia, Oceanía y Américas. ¿Y los
pueblos primitivos en África?
Los pueblos primitivos traídos por Emmanuel fueron
puntuales. Y existieron, de hecho. Ernesto Bozzano en la
obra “Pueblos primitivos y manifestaciones
supranormales”, cita el pensamiento de sociólogos y
antropólogos (E. B. Taylor, Grant Allen, Brinton, Goblet
d’Alviella, Huxley y Herbert Spencer, para quedar apenas
aquellos citados en la introducción de la obra), que
refuerzan la existencia de pueblos primitivos no apenas
en África, sino en varios lugares.
¿Es equivocado de parte de Emmanuel citar apenas pueblos
primitivos de África? El autor escribe sobre lo que
entiende ser lo más adecuado para ilustrar en un
contexto, entre tanto, las Filipinas no quedan en África
y también es citada. El objetivo del texto es claro como
la comprensión de que la Tierra es una gran escuela y
que cada uno de esos pueblos tienen un papel en el
progreso de la humanidad, inclusive las razas
sub-humanas, pueblos primitivos que poblaron el planeta.
El autor espiritual explica cada ejemplo citado:
- Pigmeos dulces de Abissínia (Etiópia) – se asemejaban
a macacos por los gritos extraños utilizados como
lenguaje;
- Kutcher – llamados por el autor espiritual como
“hermanos negros”, se alimentaban de ratones para
mitigar la propia hambre y pasaban los días echados en
el suelo;
- Africanos orientales – entre esos pueblos no existía
unión moral entre padres e hijos;
- Lácticos, interior de África – no conocían
sentimientos de compasión o deber;
- Remanentes de Filipinas – “yerran en las montañas, a
la manera de animales indomesticables”;
- Los botocudos – “ejemplares terribles de brutalidad y
ferocidad”
Los pueblos fueron citados por la demostración de sus
primitividades y no por preconcepto o discriminación.
“En la inmensa escuela, hay tareas múltiples y urgentes
para todos los que aprenden que la vida es movimiento,
progreso, ascensión”, comenta Emmanuel en otra parte del
texto.
Y por fin, pero no menos importante, el autor de la
publicación en las redes sociales, cita la expresión
utilizada por Emmanuel “civilización refinada” que ya
posee la aviación para viajar por el globo terrestre,
“pueblos hay que encontrar ‘infinitamente distantes del
mundo moral’. Y que, ‘casi nada diferiendo de los
irracionales’, no consiguieron desenvolver la ‘mínima
noción de responsabilidad’”.
“¿Quien son esos pueblos a que Chico Xavier alude? Son
los africanos y los pueblos originarios brasileños
pertenecientes al tronco macro-jê.”
Emmanuel, cuando contextualiza sobre los pueblos
primitivos, inicia la sentencia de la siguiente forma:
“Si es verdad que la civilización refinada de hoy volar,
por el mundo, contornándolo en algunas horas,
caracterizándose por los más altos primores de la
inteligencia, poseemos millones de hermanos por la
forma, infinitamente distantes del mundo moral (...)”.
El autor espiritual utiliza un recurso linguístico para
evidenciar que el distanciamiento del “mundo moral” se
da por el comportamiento primitivo, demostrado arriba.
Está contextualizado, no es genérico y ni irreverente.
El refinamiento de una civilización es el civismo que se
observa en Europa del presente, por ejemplo: muchos
confunden, sobre todo aquellos que no conocen o no
estuvieron allá, la educación civil de un pueblo con su
evolución moral. Existen diferencias.
Emmanuel aun informa en el texto que “cada pueblo, en el
pasado o presente, constituye una sección preparatoria
de la Humanidad, al frente del porvenir.”
Delante de todo lo que fue presentado, respetando el
desenvolvimiento intelectual, méritos y títulos del
autor del post, sin hacer juicio de valor de que su post
podría sugerir persecución ideológica, atribución de
racismo y preconcepto en textos recortados fuera de
contexto, etc., fue una excelente oportunidad que
tuvimos para conocer un texto más del espíritu Emmanuel
por la psicografía de Chico Xavier. No soy emmanuelista,
por el contrario, por eso quedamos muy a voluntad para
comentar.
Aunque entendamos que el post es un derecho de cada uno,
tal vez fuese prudente evaluar, o como de odio,
disensión y pensamientos obsesivos tomaron cuenta del
movimiento espírita en los últimos años, sobre todo en
internet. Las últimas elecciones evidenciaron el abismo
que existe en la actualidad, entre aquellos que colocan
la Doctrina Espírita en primer lugar, de aquellos que
hacen uso de cuestiones sociales para aumentar la
disensión, independiente de cual sea su interés
político, en detrimento de la Doctrina. Tal vez sea una
buena reflexión, praticar la caridad para con el trabajo
de aquellos que nos antecedieron, independiente de la
concordancia o no con su contenido. Sería tan bueno si
pudiésemos rescatar la fraternidad genuina entre los
Espíritas, para crear puentes entre los pensamientos
divergentes, bélicos, farisaicos que hoy infestan las
relaciones entre los espíritas... ¡creo que eso es
posible!
“Yo os digo, en verdad, que son llegados los tiempos en
que todas las cosas han de ser restablecidas en su
verdadero sentido, para disipar las tinieblas, confundir
a los orgullosos y glorificar a los justos.” (Espíritu
de Verdad)