Las cuestiones aquí
expuestas son bastante
importantes por la razón
de que los espíritas no
posean acceso a ellas,
de una manera general,
justamente por ellas
parezcan fuera del
contexto doctrinario,
sin embargo, en la
medida en que usted
lector vaya leyendo
podrá percibir como la
Teoría de los Antiguos
Astronautas tiene que
ver con la Doctrina
Espírita. Y no podemos
olvidarnos de un hecho
muy importante señalado
por el Codificador
(El Libro de los
Espíritus, Prolegómenos)
“Entre los Espíritus
que concursaron para la
realización de esta
obra, varios vivieron en
diversas épocas sobre la
Tierra, donde predicaron
y practicaron la virtud
y la sabiduría. Otros
no pertenecen, por el
nombre, a ningún
personaje del cual la
Historia haya guardado
el recuerdo, pero su
elevación es probada por
la pureza de su doctrina
y su unión con aquellos
que traen un nombre
venerado”. (La
cursiva es nuestra.)
Entre algunos de los
nombres registrados por
la Historia encontramos
a San Luis, Platón etc.,
que se encontraban en
aquellos tiempos ya
reencarnados en otros
mundos. San Luis, por
las informaciones
mediúmnicas
suministradas por él
mismo, era habitante de
Júpiter y había venido a
la Tierra en misión.
Bach era habitante de
Europa (uno de los
muchos satélites del
planeta Júpiter). Platón
era habitante de Urano,
et.
Durante la producción de
la Codificación Espírita
ellos dejaban el cuerpo
físico reposando en sus
mundos y venían en
espíritu a prestar las
aclaraciones necesarias
para la composición de
aquel importante caudal
de conocimientos. Sólo
este hecho ya sirve para
crear un punto de
conexión entre los seres
inteligentes que viven
en otros mundos y el
despertar de la
conciencia humana para
cuestiones más elevadas.
Tal cual fue realizado
también en el pasado
remoto. Pues la base de
todas las religiones
antiguas es la misma del
Espiritismo, con la
diferenci de este poseer
la explicación racional
para lo que antes era
simplemente considerado
como acontecimiento
fantástico.
Espíritus encarnados en
otros planetas tuvieron
parte hasta incluso en
la Codificación Espírita
Hicimos aquí una
vinculación de
informaciones de modo a
crear un hilo entre
acontecimientos del
pasado y del presente
dentro del contexto
espírita. No podemos
olvidarnos de que la
vida fuera de la Tierra
es un concepto
ampliamente divulgado
por las obras espíritas
y espiritualistas. La
llegada de los capelinos
a la Tierra ya sirvió
como un buen ejemplo de
la existencia de vida
inteligente fuera de
“nuestro” mundo.
Espíritus encarnados en
otros planetas tuvieron
parte incluso en la
Codificación Espírita,
trayendo nuevas luces
para expandir el
conocimiento humano
sobre Dios, el Universo
y nosotros mismos. A fin
de cuentas, ellos fueron
misioneros enviados para
esclarecernos acerca de
todo aquello que
ignorábamos.
Buscamos proporcionar
una visión bajo la
óptica espírita de
eventos remotos que
hasta hoy permanecen
espantando a los
investigadores, y eso
solamente ocurre por
falta de la comprensión
más dilatada
proporcionada por el
Espiritismo.
La vida es un fenómeno
universal e,
infelizmente, las
potencias mundiales que
ya poseen conocimiento
sobre eso esconden
descaradamente de la
población esa importante
noticia.
No estamos hablando aquí
de conspiraciones
espectaculares ni de
tramas interplanetarias
entre seres humanos y
seres de otros mundos;
abordamos hechos reales
y documentados.
No queremos lanzar leña
en la hoguera de la
ignorancia, sino
auxiliar a encender la
luz sobre eventos que
son poco divulgados y
mantenidos bajo sigilo
casi que absoluto por
los gobiernos y
militares de casi todas
las naciones de la
Tierra.
Iremos a desmenuzar
inmediatamente en el
primer capítulo el
principal motivo de la
dificultad de los
investigadores en
general en aceptar la
real existencia de vida
fuera de este planeta. E
invitamos a usted para
ese “paseo”. Un simple
cambio de visión puede
auxiliar mucho a
encontrar respuestas
para lo que antes era un
enigma insoluble. Ya
estamos desarrollados lo
suficiente para
comprender lo que en el
pasado fue mantenido
bajo estricto sigilo por
los motivos de siempre:
población mantenida en
la ignorancia es
gobernada con mayor
facilidad...
Nuestro mundo no ocupa
una posición destacada
en el Cosmo, ni en el
propio sistema solar
La Arqueología
tradicional no posee las
respuestas para las
construcciones
ciclópicas y demasiadas
obras megalíticas
construidas con rocas
pesando miles de
toneladas (y sin ninguna
tecnología existente en
aquella época para
realizar tal tipo de
hazaña).
Y, a causa de eso, esas
cuestiones quedan sin
una explicación
convincente, dando
margen para las más
variadas suposiciones y
teorías absurdas que
nada realmente consigue
explicar, y parecen a
sabiendas creadas para
confundir.
La Teoría de los
Antiguos Astronautas
posibilita respuestas
para esas dudas, pero,
simultáneamente, abre un
número casi infinito de
nuevas preguntas. De una
cosa, sin embargo, no
tenemos dudas: si
actualmente ya es
posible antever algunas
de las próximas
conquistas que serán
realizadas en la Tierra
del futuro, nuestro
pasado presenta también
una gran cantidad de
riquezas que pueden
abrir “otras puertas”
para nuestra
comprensión.
Este mundo no fue
habitado en el pasado
solamente por seres
ignorantes que comían
desechos de animales y
olían tan mal como
estos. Seres de esa
estirpe no conseguirían
producir las colosales
construcciones que son
irrealizables
actualmente. Sin
ingenieros, sin técnica,
sin conocimiento, sin
maquinaria etc., ¿ellos
habrían hecho solos todo
lo que ya fue encontrado
esparcido por el
planeta?
La falta de respuestas
adecuadas para la
cantidad de
realizaciones efectuadas
en el pasado hace que
divaguemos, buscando tal
vez en las estrellas y
en mundos distantes –
por el pensamiento – las
respuestas que puedan
sanar definitivamente
nuestras preguntas. Es
inadmisible que
continuemos
comportándonos como si
fuésemos lo “máximo” de
la Creación en términos
de cultura y desarrollo
tecnológico.
¿Por qué las leyendas de
los pueblos son tan
semejantes como la de
ciertos eventos?
La misma “causa” que dio
origen a la vida
inteligente aquí en la
Tierra puede haber
generado ese mismo
efecto en una
multiplicidad incontable
de planetas esparcidos
por la inmensidad
cósmica. Es hasta más
coherente haber ocurrido
así que continuemos
pensando que somos una
excepción y que nos
encontramos abandonados
en el infinito del
espacio sideral... De
hecho, en verdad, no
podemos ni imaginar que
nosotros somos únicos en
ese Universo en razón de
todo lo que se encuentra
abordado aquí. Lo más
probable es que seamos
“resultado” y no
“causa”...
Si estuviéramos solos en
el Cosmos, debemos creer
entonces que una
gravísima epidemia se
extendió en la
Pre-Historia y contaminó
a todos los pintores de
aquellos tiempos,
haciendo que ellos
retratasen figuras
bastante semejantes
(representando imágenes
dignas de cualquier
adepto de cuentos de
científica ficción). Y
otra epidemia,
posiblemente asociada a
un alto grado de
demencia, hizo que
aquellos hombres
transportaran – no
imaginamos como –
descomunales bloques de
rocas que pesaban miles
de kilos para
simplemente realizar una
“construcción bonita”
para quedar bajo ella
mirando para el cielo,
observando las estrellas
sin vida…
¿Por qué las leyendas de
los pueblos antiguos –
muchos de ellos
desconociendo
completamente la
existencia de otros
pueblos – son tan
semejantes en cuanto a
ciertos eventos:
diluvio, la creación de
una primera pareja,
“dioses” caminando por
la Tierra y enseñando
una serie de cosas para
los hombres incultos?
¿Cuál es la razón de la
obsesión de los pueblos
orientales antiguos en
retratar escenas de
batallas aéreas, armas
que explotaban ciudades
enteras, etc.? No
existían en aquella
época remota ni aparatos
de TV, ni películas de
ficción y mucho menos
Hollywood...
¿Como explicar la
existencia de monumentos
que desafian a los
milenios?
¿Cómo las culturas
antiguas consiguieron
erigir monumentos que
superaron los milenios?
¿Cuál fue la tecnología
empleada? El planeta
Tierra atravesó tantas
calamidades desde
aquellos periodos y las
construcciones se
mantuvieron intactas,
mientras los volcanes
hacían estremecer todo,
los terremotos arrasaban
todo, los maremotos
destrozaban poblados en
los márgenes de los
océanos, etc., y
actualmente los más
modernos edificios se
agrietan cuando ocurre
un temblor de tierra...
Actualmente, el mundo de
la Arqueología se
encuentra repleto de la
más sofisticada
tecnología posibilitando
así avances
considerables. Y tales
innovaciones sirvieron
para que – entre otras
cosas – los arqueólogos
descubrieran, usando
satélites y mapas en 3D,
diversas pirámides
enterradas.
Con eso la tecnología
proporciona la
realización de
descubrimientos e
investigaciones sin la
necesidad de excavación
inicial. Lugares antes
inaccesibles ahora son
de entrada a través de
mapas, para un posterior
trabajo de excavación.
Y, para citar solamente
un ejemplo de las
posibilidades
proporcionadas por el
uso
de satélites, la
egiptóloga Dra. Sarah
Parcak usó imágenes y
consiguió observar cerca
de diez metros debajo
del suelo desértico de
Egipto, encontrando
diecisiete pirámides
hasta entonces
desconocidas y
aproximadamente mil
tumbas. Es la Ciencia
proporcionando mayor
optimización del tiempo
y de las
investigaciones,
teniendo en
contrapartida menos
trabajo material. Ahora
los arqueólogos saben
exactamente donde ellos
deben cavar para
encontrar alguna cosa. Y
los descubrimientos se
vayan acumulando...
¿Fuimos visitados por
seres provenientes de
otros orbes que
desconocemos? ¿Ellos
vinieron aquí para
cumplir algún papel
importante? ¿Fueron
misioneros que trajeron
importantes conquistas
para retirar a los
antiguos autóctonos de
la barbarie? ¡Es bien
posible!
