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"Ni la Doctrina Espírita ni la Casa Espírita me
necesitan" |
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Nacida en Brasil, Ururaci Szlezak (foto) reside
desde hace 30 años en Austria, donde está casada con
Sebastian Szlezak y tiene cuatro hijos. Nuestra
entrevistada conoció la doctrina espírita a finales de
la década de 1980, se volvió espírita a principios de la
década de 1990 en Viena por la influencia principalmente
de las conferencias ofrecidas en su ciudad por Divaldo
Franco, Raúl Teixeira y Juan Antonio Durante, quien fue
presidente de la Federación Espírita Argentina durante
muchos años.
En la entrevista que amablemente nos concedió, nos
cuenta cómo surgió la Sociedad de Estudios Espíritas
Joanna de Angelis – SEEJA, de Viena, de la que es una de
los fundadores.
¿Cómo surgió la idea o el deseo de fundar un centro
espírita en Viena?
La intención inicial era sólo formar un
Grupo de Estudios, donde pudiéramos estudiar las Obras
de Codificación Espírita. Pero otras carencias
doctrinarias fueron surgiendo a través de las personas
que comenzaron a frecuentar el grupo, lo que nos hizo
adaptarnos a esas necesidades.
¿Hubo dificultades burocráticas para que ello ocurra?
No. Tuvimos el cuidado de informarnos
primero con grupos espíritas ya formados. Recibimos los
estatutos de casas espíritas de Alemania y del GEEAK-Vorarlberg.
Ese fue el que mejor se adecuó a nuestra realidad,
porque es una casa espírita ubicada también en Austria.
La adaptamos a nuestra realidad, fuimos a la Policía,
donde se hace este tipo de registros en Viena, y gracias
a Dios se dio y está funcionando bien...
¿Hace cuantos años que funciona SEEJA?
¡Nuestra casa está funcionando desde
hace casi 9 años! Y estamos a todo vapor para la
celebración de nuestro 10º aniversario, con algunos
nombres de conferencistas ya confirmados.
¿De dónde surgió la inspiración para el nombre del
centro?
Por el gran cariño y respeto que tenemos por el Espíritu
Joanna de Angelis. Y por la intervención positiva y
nítida de ella, varias veces, en nuestras vidas.
Además de las dificultades en el
ámbito estructural, ¿cuáles son las dificultades para
mantener el centro, los trabajadores, los grupos de
estudio, la evangelización, etc.?
En relación, digamos, al mantenimiento
de la casa tenemos las mismas dificultades, creo, de
todas las casas espíritas, pero también puedo decir que
tenemos la gran felicidad de que nunca nos ha faltado
dinero para el alquiler y siempre hemos tenido un poco
de dinero en caja hasta ahora. Creo que todos vivimos y
tenemos que lidiar con este miedo de un día no tener
dinero para pagar el alquiler. Pero, gracias a Dios,
como he dicho, estamos logrando solventar nuestras
responsabilidades, a pesar de las dificultades.
¿Cuáles son las actividades en curso?
Grupos de Estudios: todos ellos están
basados en los libros de Codificación, Yvonne do Amaral
Pereira y por supuesto de la mentora Joanna de Ángelis.
Club del Libro: tenemos lo que llamamos
el Club del Libro, donde en todo un año abordamos las
obras de un Autor espiritual a través de los
trabajadores de la casa y los invitados de otros centros
espíritas de Austria y otros países. Este año estudiamos
las obras de la querida y amada Yvonne do Amaral, el año
pasado tuvimos a Manoel Philomeno de Miranda y el
próximo año tendremos a André Luiz.
Evangelización: nuestra casa tiene
Evangelización para Jóvenes y Bebés, pero los niños de 5
a 12 años no aparecen, incluso si se ofrecen actividades
para este grupo de edad.
Las diferencias en relación al idioma
¿siguen siendo un obstáculo para la divulgación del
Espiritismo en tierras germánicas?
¡No! Nuestra casa tiene un día
específico sólo para ese público que quiere conocer la
doctrina espírita. Nuestros jóvenes, a pesar de ser
hijos de brasileños, todos hablan alemán. Y nuestra
Evangelización Infantil está preparada para hacer todo
el trabajo en ese idioma también. También creo que
cualquier espírita que estudie la doctrina espírita y
resida aquí debe aprender el idioma alemán, para poder
devolver a este país que nos ha acogido, este mensaje
positivo que trae el Espiritismo.
¿Existen frecuentadores nativos en su centro?
Sí. Hace ya algún tiempo que transferimos el trabajo en
lengua alemana a un nativo, que es mi hijo Jeremias
Szlezak
¿Cuál es la reacción de ellos cuando ven por primera vez
la casa espírita?
Curiosidad y sorpresa, porque no imaginan que al entrar
a una casa espírita no van a ver fenómenos, sino muchos
libros y preguntas.
¿Qué consejos les podría dar a aquellos que deseen
fundar un centro espírita en Europa?
¡Primero ver si en la localidad donde
vive no hay una casa espírita! Quizás usted pueda ser
útil allí de alguna manera. Si esto no fuera posible, es
decir, existe una casa, pero en ella usted no podrá ser
útil, comience siempre con El Evangelio en el Hogar con
seriedad y paciencia. Los Benefactores Espirituales
nunca nos dejan solos. Ellos están participando en
nuestras más pequeñas momentos y saben de nuestras
ansiedades, de modo que en el momento adecuado colocan a
personas y situaciones en nuestras vidas que nos
servirán de palanca. Detalle: estas palancas no siempre
serán positivas a nuestro modo de ver. Por lo tanto,
tenemos que estar conectados con ellos para que tengamos
ojos para ver y oídos para escuchar.
¿Qué la motiva a no desistir y a
continuar incluso con obstáculos por vencer?
¡El proyecto del codificador de la Doctrina Espírita es
simplemente fantástico! Me siento agradecida y
complacida de ser parte, tal vez, en una mínima y casi
insignificante parte de este proyecto. Conozco mis
cualidades, porque de lo contrario sería desagradecida
con todo el bien que he recibido desde mi reencarnación
en este planeta, pero también conozco mis limitaciones y
bloqueos. Y soy consciente de que en esta etapa de mi
vida sólo la Doctrina Espirita puede ayudarme. También
sé que ni la Doctrina Espírita ni la Casa Espírita me
necesitan, yo sí tengo necesidad de ellas en mi vida.
¡Así como mi núcleo familiar, que me hace mejor hoy que
ayer y mañana mejor que hoy! ¡Y que así sea!