Nacida en Paraisópolis (MG) y ahora residente en
Espírito Santo do Pinhal (SP), Josiana Martínez (foto)
es Maestra en Gerontología, con licenciatura
en Fisioterapia. Está vinculada a la Asociación
Espírita Estrela, Luz e Verdade, en la misma
ciudad donde reside. Actuando intensamente en la
Campaña Mundial de El Evangelio en el Hogar, nos
habla en esta entrevista sobre su experiencia.
¿Cómo se volvió espírita?
Por la convivencia con mi
marido. Cuando lo conocí, frecuentaba la iglesia
católica. Nos casamos, fuimos a reuniones y
conferencias en su compañía. Sucedió
gradualmente porque había una restricción a la
religión espírita por parte de mi familia y mí,
que no conocía esta filosofía de vida.
¿Qué le llama más la atención
en la Doctrina Espírita?
Los estudios
sobre el ser humano en los aspectos físico,
mental y espiritual. El enfoque de la
espiritualidad, del mundo invisible de una
manera natural. Algunas preguntas me
preguntaban: ¿Cómo definiría Dios la vida de
cada persona? ¿Dónde y con quién vas a vivir? Y
encontré en la doctrina el consuelo espiritual y
el esclarecimiento de que estamos aquí para una
misión individual y colectiva, y lo que hacemos
puede afectarme a mí y al prójimo. Nos consuela
en el sentido de que nuestra vida no termina con
la muerte; es una transición. Y nos ayuda a
comprender que elegimos estar con las personas
con las que necesitamos convivir para nuestra
evolución. Estamos aquí para aprender, si no
Dios sería injusto. Me ayuda en mi vida
personal, nos fortalece para seguir adelante.
¿Y el movimiento espírita?
Dinámico, vasto en la
literatura, a pesar de observar la necesidad de
tener más unificación, no personalismo.
¿Cómo se integró al trabajo de divulgación de El
Evangelio en el Hogar?
Viviendo en Espírito Santo do
Pinhal tuve la oportunidad de conocer a María
Tonietti Compri, una promotora de El Evangelio
en el Hogar en Brasil y en el extranjero. Ella
era conferencista, escritora y realizaba
reuniones en la ciudad (regresó a la patria
espiritual en 2016). En una de las conferencias,
fue invitada a realizar un programa de radio;
esto ocurrió el 30 de noviembre de 2002. Al
principio mi esposo participaba y desupés
comencé a acompañarlo en el programa; así, la
amistad se fortaleció espiritualmente y fui
acogida como su hija de corazón.
¿Cómo surgió la Campaña Mundial?
En un Congreso, en febrero de
2000 en Brasilia. María Tonietti Compri relata
en uno de sus libros (El Evangelio en el
Hogar. Por un Hombre Nuevo y un Mundo Mejor)
que estaban autografiando los libros y
conversando sobre la importancia de El Evangelio
en el Hogar, incluyendo la frase que fue
enfatizaba: "La sociedad está constituida por
criaturas que se forman en los hogares". En este
encuentro estuvieron presentes varios amigos de
los dos planes y entre ellos el Dr. Edwin Genaro
Bravo, de Guatemala, en esa oportunidad miembro
del Consejo Espírita Internacional, quien le
dijo: "María Compri, lancemos hoy, aquí y ahora,
la Campaña Mundial de El Evangelio en el Hogar".
En febrero de 2001, Maria
Tonietti Compri presentó la Campaña Mundial de
El Evangelio en el Hogar durante un evento de
CONCAFRAS, realizado en dos ciudades
simultáneamente: São Paulo-SP
y Ceres-GO, con contacto en vivo a través de una
pantalla. En la clausura ella destacó la
importancia de la unión en torno al ideal de
implantar el Evangelio en los hogares, en los
lugares de trabajo y especialmente en los
corazones.
¿Cómo evalúa los resultados de la campaña,
nacional y mundial?
Nunca pensé este aspecto. Lo que
he aprendido es que las cosas suceden de una
manera natural y la espiritualidad es la que nos
indica el camino, los momentos. Las personas
aparecen, estamos en este trabajo desde hace
casi 18 años en Espírito Santo do Pinhal-SP. No
nos damos cuenta del tiempo que ha pasado.
Fuimos acogidos por María Tonietti Compri y su
familia. Tenemos una amistad de hermanas, aunque
distantes y es una alegría cuando estamos
juntas.
¿Cuáles son sus recuerdos más
destacadas de la iniciativa?
Al principio, acompañé a mi
esposo Luiz en la radio y cuando María Compri
pronunciaba mi nombre diciendo a los oyentes:
"Hoy Josi está en nuestro programa, ella está
aquí y les dará los buenos días", me daba
vergüenza. Verá: a veces había tres o cuatro
personas en el estudio y yo no quería hablar.
Pero poco a poco, ella se fue aproximando con
sus gestos de madre amorosa y yo me convertí en
su hija de corazón, como dije antes. Con el paso
del tiempo, ya no me distanciaba y siempre que
podía estaba cerca. Ella tuvo que dedicarse más
a la casa y pensé en grabar el programa para la
radio. Durante unos años, hicimos varios
encuentros semanales en Albertina- MG donde
vivía, un pueblo cerca de Espírito Santo do
Pinhal -SP. Después de la grabación, tenía ese
cafecito especial con ella y su esposo Manuel
(emoción, recuerdos muy vívidos), que traía con
mucho cariño el pancito de la panadería.
De
ese intercambio internacional, ahora una
realidad, como lo evalúa?
Lo que me marcó en esta
transición fue cuando estuvimos en 2018 en la
Mansión del Camino en Salvador-BA para el
Movimiento Tú y la Paz, que fue una invitación
hecha por Milcíades, de Paraguay. Nos reunimos
con personas de otros países y en esa ocasión
conocí a Elsa Rossi. Le pedí que grabáramos un
mensaje a los oyentes del programa de radio, y
desde entonces ella participado en este
proyecto. En 2019 regresamos a la Mansión del
Camino y conocimos a otras personas que están en
nuestros contactos. Recientemente fuimos
invitados por Orson Carrara a los Encuentros
Fraternos on-line; así que comenzamos nuestra
participación más efectiva en las redes
sociales. Nuestra última integración está
teniendo lugar con la Red Amigo Espírita.
¿Algo que quiera añadir?
Estamos presenciando algunos movimientos
fraternos entre religiones. Espero que esto
pueda ser una práctica constante, promoviendo la
fraternidad en todas las naciones. Con el
advenimiento de la tecnología nos acercamos,
podemos crear congresos, seminarios,
conferencias uniendo las ideas, filosofías,
ciencias y religiones para un bien común. Somos
hermanos, hijos del mismo
Padre, unidos por el amor y para el amor, para
nuestra evolución espiritual.
Sus
palabras finales.
¡Gratitud! ¡Gratitud por la
invitación y por poder contribuir! |