La
frase superior es cita de la entrevista que
sigue, y nos fue concedida por el cofrade Luís
Jorge Lira Neto (foto), nacido en la
ciudad alagoana de Pilar, quien actualmente
reside en Recife (PE). Licenciado en Ingeniería
Eléctrica y postgrado en Finanzas y Máster en
Economía, es empresario y consultor, además de
especialista en el mercado de energía eléctrica
y miembro del Instituto Arqueológico, Histórico
y Geográfico de Pernambuco. En las lides
espíritas, participa en la Asociación Espírita
Casa dos Humildes, de Recife, en la que trabaja
como asesor de Comunicación Institucional. En
esta entrevista, nos habla, entre otros temas,
de su trabajo de investigación sobre la obra de
Kardec y el papel del profesor de francés en la
estructuración de la doctrina espírita.
¿Cómo y cuándo se convirtió
en espírita?
Desde la adolescencia me gustaba
leer la Biblia y, después de leer un libro sobre
la Reencarnación, tuve interés en leer los
libros fundamentales del Espiritismo. Luego en
1983, a la edad de 23 años, decidí frecuentar la
Federación Espírita del Estado de Alagoas, en la
que ejercí cargos directivos, participé en el
Instituto Espírita Manoel Batista y en la
organización de eventos espíritas en Alagoas.
Presidí la Asociación Brasileña de Divulgadores
del Espiritismo (Abrade) y dos asociaciones de
divulgadores del Espiritismo, en Alagoas y
Pernambuco.
¿Qué destaca desde su óptica
en el contenido espírita?
El contenido espírita
proporciona una mirada racional a la realidad
del Espíritu, a los problemas humanos y al
autoconocimiento. Provoca una necesidad
persistente de conectarse con el otro, como
miembro de la familia universal, además de
facilitar la comprensión de la Justicia Divina.
Capacita para mirar la Vida con la lente de la
Gratitud.
¿De dónde vino su interés por
la investigación espírita?
El interés vino naturalmente
ante los estudios de los principios espíritas y
el interés histórico sobre el Espiritismo y su
codificador, Allan Kardec. El conocimiento de la
formación de la Doctrina Espírita profundiza la
comprensión de las acciones de los Espíritus, de
acuerdo con los designios de las leyes divinas y
la colaboración de los encarnados en esta
conquista, observando que la separación de la
acción entre el mundo espiritual y el físico es
meramente circunstancial.
En síntesis compacta, ¿qué
puede decir de su investigación sobre El
Libro de los Espíritus, su historiografía,
las religiones y Allan Kardec y su obra?
En síntesis, podemos afirmar que
existe un proceso de transformación del
Espiritismo en otra "religión del libro". Se
identifican los requisitos característicos: la
sacralidad de los textos de los libros, los
oráculos, la profecía, el espacio sagrado, los
mitos y los ritos, según el concepto de la
Fenomenología de la Religión (Mircea Eliade,
Rubens Otto y Julien Ries) que se basa en la
Filosofía Fenomenológica de Edmund Husserl.
Visiones del arcaísmo de las religiones
tradicionales que aún insisten en la práctica
del Espiritismo, en una versión opuesta a los
principios establecidos en la Doctrina Espírita,
de carácter eminentemente filosófico de
consecuencia moral.
¿Qué conclusión primera llevó
su investigación a la conexión de la obra - El
libro de los Espíritus - y su autor?
El primer hallazgo es que Allan
Kardec en la elaboración de El Libro de los
Espíritus, especialmente en la 2ª edición,
ajustó los textos para una mejor comprensión de
los principios del Espiritismo, priorizó la
didáctica en detrimento del formalismo, utilizó
su experiencia como pedagogo y autor de obras
didácticas para concebir, organizar y redactar
el libro. No se limitó a recopilar los escritos
de los Espíritus, sino que desempeñó el papel de
investigador, en el mayor sentido de la palabra:
observó los fenómenos, los problematizó, probó
hipótesis, elaboró teorías y ofreció al público
una obra filosófica, la Doctrina Espírita, como
habían observado Canuto Abreu y Herculano Pires.
De la historiografía de la
obra, ¿qué es lo que más llama su atención?
La forma en que Kardec
estructuró y redactó El libro de los
Espíritus nos hace inferir que actuó como
coautor de la obra, superando el concepto dado
como codificador (colocar un código). Tal vez
por negligencia de los espíritas, que se
aferraron al contenido y diseminaron la idea de
todo un libro concebido en el Plano Espiritual,
sólo transcrito por el codificador, una visión
reduccionista del trabajo y la racionalidad de
un espíritu de élite como Allan Kardec, que,
como bien observó Silvio Chibeni, "no fue un
mero ayudante de espíritus".
Y de la historia de las
Religiones, ¿qué se puede extraer?
Aquellos que actualmente
acompañan el Proyecto Allan Kardec (ver el sitio
web https://projetokardec.ufjf.br) verificarán
las decisiones de Kardec sobre qué colocar o no
en los libros fundamentales del Espiritismo.
¿Eso tiene importancia? Sí, evitaría el proceso
continuo de transformar el Espiritismo en otra
religión de libro, como el judaísmo, el
cristianismo, el sijismo, entre otros, las
cuales constituyeron en cánones sagrados e
inmutables las formas orales y escritas de
enseñanzas procedentes de diversas fuentes,
dependiendo de la corriente dominante de cada
época. Una dura realidad para quien concibió una
Doctrina que debería evolucionar con la Ciencia.
Esto se debe a la acción de los espíritas al
moldear el Espiritismo como una religión
tradicional (véase el discurso de Kardec: ¿Es el
Espiritismo una religión? Revista Espírita,
diciembre de 1868).
En su concepción, ¿cuál es la
relación entre Allan Kardec y su obra?
Entender a Kardec y su obra
implica la discusión sobre cuáles son las obras
de Kardec y el grado de influencia de los
Espíritus en su elaboración. Considero cuatro
las obras de Allan Kardec: 1- El método de
observación y análisis de los fenómenos y
extraer las enseñanzas de ellos; 2- Las
Publicaciones de los resultados de estos
análisis, desde las obras fundamentales, pasando
por las subsidiarias y la Revista Espírita; 3-
La creación de la Sociedad de Estudios e
Investigaciones de los fenómenos espíritas; y 4-
El Plan de Divulgación y Organización del
Movimiento Espírita (ver La Constitución
Transitoria del Espiritismo, Revista Espírita,
diciembre de 1868).
¿Algo más que quisiera
añadir?
Enfatizar la responsabilidad de
los espíritas en relación con el conocimiento
profundo tanto de los principios de la Doctrina
Espírita, como de los temas tratados
anteriormente: la Historiografía de la Obra, la
participación de Kardec y la influencia de los
Espíritus en la elaboración del Espiritismo.
Seguramente esto traerá un impacto razonable en
las nuevas generaciones que, libres de formas
arcaicas, pueden concebir un movimiento de
revolución en las ideas, sustituyendo el
materialismo por la espiritualización de la
humanidad, dedicándose en la aplicación de la
ética espírita, que en esencia es cristiana,
evitando en su práctica los recorridos
dogmáticos en los que nuestra generación se
enredó. A ello me dedico.
¿Hay material disponible de
estas investigaciones en Internet para el
conocimiento del lector?
Muchos estudiosos e
investigadores se dedican a los trabajos de
investigación e historiográficos del Espiritismo
en diversas páginas de Internet y en los medios
virtuales. En particular, acompaño blogs como:
Bruno Tavares, Espiritismo Comentado (Jáder
Sampaio), Wilson García, Eric Pacheco; las
páginas CSI del Espiritismo (Carlos Seth),
FEAL/Mundo Maior (Paulo Figueiredo), Akol (Adair
Ribeiro), Obras de Kardec, Portal Luz Espírita
(Ery Lopes); las entrevistas de Marcos Milani,
Charles Kempf, Vendrani Donha, Cosme Massi y
Jaime Ribeiro; grupos de investigación CPDoc,
CCDPE-ECM, Liga de Investigadores del
Espiritismo y tantos otros, en los que
encontraremos vasto material.
Sus palabras finales.
Considero importante seguir los
debates actuales en torno a los libros de la
Codificación, o, mejor dicho, de las Obras
Fundamentales de Kardec, tanto en los aspectos
historiográficos como doctrinarios, con la
comparación de las diversas ediciones de estas
obras. El acceso a las fuentes primarias
disponibles en Internet de las cartas de Kardec
y de otros documentos, así como la participación
en discusiones sobre el movimiento espírita
post-Kardec, nos permitirán, finalmente, conocer
a Kardec en su intimidad y su participación en
la elaboración de la Ciencia Espírita,
desmitificándolo, eliminando el barniz
desgastado colocado para producir un mito, a
semejanza de tantos. Ahora vivimos en el momento
"Kardec, el hombre y su Obra". Los principios
son de los Espíritus, pero la Obra es de él.
Honor a Kardec.
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