Obras Póstumas, un libro olvidado Ciento veinte años después de su publicación, suena nuevamente la hora de divulgarlo ampliamente, para que sus preciosos textos estén con nosotros para orientarnos el procedimiento y los pasos en el bien

He ahí un libro muy especial. ¡Olvidado, infelizmente! Invito el lector a buscar su ejemplar en la estantería de su biblioteca para ojear la obra. Sugiero iniciar por el índice para enterarse del contenido del libro.

Contiene él dos partes. En la primera de ellas, estudios de Kardec sobre excitantes temas y en la segunda parte anotaciones íntimas, detalles de la vida particular del Codificador, comunicaciones de los Espíritus directamente conectados a la tarea de la Codificación Espírita y la preciosidad de los textos Proyecto 1868, Constitución del Espiritismo y Credo Espírita.

Como se sabe, el libro fue publicado en enero de 1890, después de la desencarnación de Allan Kardec, conteniendo anotaciones, textos y estudios encontrados en su gabinete de trabajo.  

A pesar de la riqueza de los estudios contenidos en la primera parte de la obra, nos parece que la segunda parte del libro debe ser consultada y ampliamente divulgada entre todos nosotros, actuales espíritas de Brasil y del mundo, principalmente a partir del texto Fuera de la Caridad No Hay Salvación. Referido texto da inicio a una secuencia maravillosa de reflexiones, que se distribuyen en los capítulos Proyecto 1868, Constitución del Espiritismo y Credo Espírita, como ya es citado arriba.

La obra aún contiene la biografía de Kardec, el discurso de Flammarion por ocasión de la sepultura del Codificador y los preciosos estudios titulados Teoría de la Belleza, La música celeste, Música Espírita, El Camino de la Vida y Las cinco alternativas de la Humanidad, entre otros.

 “Los pobres jamás fueron rechazados en mí casa,
o tratados con dureza”

Cuando vuelvo a releer tales preciosidades, me quedo pensando: ¿Por qué nos olvidamos de ellas? ¿Sería liviandad nuestra? ¿Sería desprecio o indiferencia? ¿Qué nos lleva a despreciar tan valiosos escritos y tan importantes reflexiones de Kardec?

Digo esto porque se trata de textos tan importantes que deberían constituir material de reflexión diaria para los estudiosos del Espiritismo.

Para mostrar la importancia del contenido de ese libro, infelizmente poco conocido por los espíritas, selecciono para el lector algunos pequeños tramos.

Al final de las pequeñas transcripciones, incluí otros comentarios:

a) “Estos principios, para mí, no son sólo una teoría, yo los pongo en práctica; hago el bien tanto como lo permite mi posición; presto servicio cuando puedo; los pobres jamás fueron rechazados en mi casa, o tratados con dureza; (...) Continuaré, pues, haciendo todo el bien que pueda, aún a mis enemigos, porque el odio no me ciega; y yo les extendería siempre la mano para quitarlos de un precipicio, si la ocasión de eso se presentara. He ahí como entiendo la caridad cristiana; comprendo una religión que nos ordena retribuir el mal con el bien, con más fuerte razón restituir el bien por el bien. Pero no comprendería jamás que nos prescribiese retribuir el mal con el mal.” – del capítulo Fuera de la caridad no hay salvación.

 “La caridad y la fraternidad resumen todas las
condiciones y todos los deberes sociales”

b) “(...) Los hombres no pueden ser felices si no viven en paz, quiero decir, si no están animados de un sentimiento de benevolencia, de indulgencia y de condescendencia recíprocos, en una palabra, mientras busquen chafarse unos a los otros. La caridad y la fraternidad resumen todas las condiciones y todos los deberes sociales; pero suponen la abnegación; ahora, la abnegación es incompatible con el egoísmo y el orgullo; por lo tanto, con sus adicciones nada de verdadera fraternidad, partiendo, de la igualdad y de la libertad, porque el egoísta y el orgulloso quieren todo para ellos. Estarán siempre ahí los gusanos roedores de todas las instituciones progresistas; mientras ellos reinen, los sistemas sociales más generosos, más sabiamente combinados, caerán bajo sus golpes. (...)” – del capítulo El egoísmo y el orgullo – sus causas, sus efectos y los medios de destruirlos.

c) “(...) Todos vosotros que soñáis con esa edad de oro para la Humanidad, trabajad, antes de todo, en la base del edificio, antes de querer coronarle el tejado; dadle por base la fraternidad en su más pura acepción; pero, para eso, no basta decretarla e inscribirla sobre una bandera; es preciso que ella esté en el corazón y no se cambia el corazón de los hombres con decretos. De igual manera que, para hacer a un campo fructificar, es preciso arrancarle las piedras y los espinos, trabajad sin descanso para extirpar el virus del orgullo y del egoísmo, porque ahí está la fuente de todo mal, el obstáculo real al reino del bien; destruir en las leyes, en las instituciones, en las religiones, en la educación, hasta los últimos vestigios, los tiempos de barbarie y de privilegios, y todas las causas que mantienen y desarrollan esos eternos obstáculos al verdadero progreso, que se recibe, por así decir, desde la niñez y que se aspira por todos los poros en la atmósfera social; sólo entonces los hombres comprenderán los deberes y los beneficios de la fraternidad; entonces, también, se establecerán por sí mismos, sin agitaciones y sin peligro, los principios complementarios de la igualdad y de la libertad. (…)” – del capítulo Libertad, Igualdad, Fraternidad.

 “El anatema secreto se vuelve oficial, y los Espíritas
serán rechazados por la Iglesia romana”

d) “El clero clamará herejía, porque verá que en él atacas firmemente las penas eternas y otros puntos sobre los cuales apoya su influencia y su crédito, clamará tanto más que se sentirá mucho más herido que por la publicación del Libro de los Espíritus, del cual en verdad, podía aceptar los principios dados; pero, en el presente, vas a entrar en un nuevo camino donde el no podrá seguirte. El anatema secreto se hará oficial, y los espíritas serán rechazados junto a los judíos y a los paganos por la Iglesia romana. En compensación, los espíritas verán su número aumentar, en razón de esa especie de persecución, sobre todo viendo a los sacerdotes acusar de obra absolutamente demoníaca una Doctrina cuya moralidad brillará como un rayo de Sol por la publicación misma de tu nuevo libro, y de aquellos que lo seguirán. He ahí que la hora se aproxima en que será preciso declarar abiertamente el Espiritismo por aquello que el es, y mostrar a todos donde se encuentra la verdadera doctrina enseñada por Cristo; la hora se aproxima en que, delante del cielo y de la Tierra, deberás proclamar el Espiritismo como la única tradición realmente cristiana, la única institución verdaderamente divina y humana.” – Tramo de un mensaje mediúmnico obtenido en Ségur, el 9 de agosto de 1863, sobre las consecuencias de la publicación de El Evangelio según el Espiritismo.

Se percibe, con claridad, que referidos textos – entre otros – necesitan ser copiados, distribuidos, leídos y estudiados en conjunto por todos nosotros en nuestras reuniones públicas o íntimas de estudios, en nuestras instituciones, por la preciosidad de sus consideraciones. Por nuestra imperfección humana, estamos muchas veces olvidados de la caridad en las relaciones, en los juicios, o nos excluimos con necias vanidades, echando a perder esfuerzos de décadas de aquellos que levantaron o fundaron las instituciones a la que actualmente nos entregamos.

Por otro lado, las anotaciones personales del Codificador, sus pensamientos íntimos (como el texto Fuera de la Caridad no hay salvación), sus luchas y dificultades necesitan nuevamente que sean colocadas a nuestra visión para que reflejemos el tiempo que perdemos con menudencias y asuntos sin importancia, retardando esfuerzos en el bien, donde deberíamos concentrar más nuestras atenciones...

Nos parece que no podemos dejar tal obra en el olvido. Ciento veinte años tras su publicación, suena nuevamente la hora de divulgar ampliamente, para que sus preciosos textos estén con nosotros para orientar el procedimiento, el comportamiento, los pasos en el bien.