La despedida de un
hombre de bien

 
En el pasado día 6 nos despedimos de una persona extraordinaria, Euclides Alves de Araújo, que regresó a patria espiritual después de 92 años de una fructífera existencia. Su fallecimiento ocurrió en la ciudad de Londrina-PR.

Mineiro de Muzambinho, Euclides vino al mundo en el día 29 de noviembre de 1920, en la finca Barra de São Domingos, situada a 11 kilómetros de la sede de la Provincia.

De Minas, donde trabajó por más o menos 10 años en la actividad de oficial  farmacéutico, él vino para Paraná, aquí ejerciendo por 45 años en la misma profesión, desarrollada en gran parte en la ciudad de Londrina-Pr, donde continuó residiendo mismo después de jubilarse.

Hablar de sus actividades en el campo espirita exigiría un espacio superior al de este editorial. Haremos, pues, aquí, tan solamente un sencillo homenaje.

Fundador y presidente del Puesto de Socorro Dr. Bezerra de Menezes, ex consejero por diversas gestiones del Centro Espirita Nuestro Hogar y cofundador de la SEPS – Sociedad Espirita de Campaña Social y de la Comunión Espirita Cristiana de Londrina, Euclides se vinculó más directamente en los últimos años de su existencia al Centro Espirita Amor y Caridad, situado en el Jardín California.

En 2003, el estimado amigo pudo realizar un antiguo sueño: la publicación de su libro “Dinámica de la Evolución”, cuyos derechos fueron por él cedidos gratuitamente a la Comunión Espirita Cristiana de Londrina.

El libro retrata bien el corazón de aquél que lo escribió.

Teniendo conocido el Espiritismo en 1954, cuando contaba 33 años de edad, Euclides no permitió estacionarse, como ocurre con muchos, en la práctica de la mediumnidad exclusiva.

Aunque tenga hecho de la mediumnidad un campo de auxilio para muchos, creando en su propia casa, con su esposa Jacyra, un puesto de socorro espiritual, se entregó, paralelamente, al estudio profundo de la Doctrina que abrazó, lector voraz que siempre fue, formó una biblioteca personal de aproximadamente 950 obras.

El origen de su libro nos lleva al remoto año de 1963, cuando Euclides leyó un artículo publicado por la revista Reader’s Digest que narraba la historia de una sentencia judicial ocurrida en Estados Unidos, donde un profesor fue cuestionado por enseñar a sus alumnos la teoría evolucionista de Darwin. 

Sensibilizado con el caso, lo transformó en conferencia, que profirió en innúmeras Casas Espiritas de la región. Años después, estimulado por amigos, resolvió transformarla en libro. Fue de esa manera que nació el libro “Dinámica de la Evolución”,  en lo cual discurrió sobre innúmeros conceptos presentados por el Codificador del Espiritismo, con la dedicación, el equilibrio y el entusiasmo que lo caracterizaban.

Preguntaron cierta fecha a Emmanuel ¿el alma humana puede elevarse para Dios tan sólo con el progreso moral, sin los valores intelectivos?

El adorable mentor espiritual de Chico Xavier entonces contestó:  

El sentimiento y la sabiduría son las dos alas con las cuales el alma se elevará para la perfección infinita. En el círculo empequeñecido del orbe terrestre, ambos son clasificados con adelanto moral y adelanto intelectual, pero, como estamos examinando los valores propiamente del mundo, en particular, debemos reconocer que ambos son imprescindibles al progreso, siendo justo, sin embargo, considerar la superioridad del primero sobre el segundo, aunque la parte intelectual sin la moral puede ofrecer numerosas perspectivas de caída, en la repetición de las experiencias, mientras que el avance moral jamás será excesivo, representando el núcleo más importante de las energías evolutivas.” (el consolador, cuestión 204.)

Bueno. Nuestro amigo Euclides Alves de Araújo, que se despidió de nosotros en la pasada semana, constituyó un ejemplo de alguien que reunió las dos cualidades mencionadas por Emmanuel, así no fue solamente un hombre sabio, pero también una criatura generosa y amorosa, que supo esparcir el bien por todos los lugares por donde pasó y que, por eso mismo, deja a todos nosotros, amigos y familiares, una inmensa añoranza.