“Clasificamos el miedo
como de los peores
enemigos de la criatura,
por alojarse en la
ciudadela del alma,
atacando las fuerzas más
profundas.”
(1)
Parte 1
Según la Gran
Enciclopedia Larousse
Cultural, por definición,
miedo es el sentimiento
de inquietud, de
aprensión en base a un
peligro real o
imaginario. La palabra
miedo se relaciona
también con recelo,
temor, horror, pavor,
pánico.
La palabra miedo se
relaciona también con
recelo, temor, horror,
pavor, pánico.
A propósito, veamos como
se expresó sobre el
miedo Thomas Hobbes
(1588-1679), filósofo
inglés, hace algún
tiempo muy discutido en
los medios del
psicoanálisis: “(...) el
miedo es un sentimiento
que nos inspira la
posibilidad real de ser
afectados por un mal
real, por un mal que
conocemos por la
experiencia”.
Nosotros los espíritas,
bien sabemos que además
de los “males reales”,
visibles, tangibles,
existen los también
reales, invisibles,
intangibles, del que nos
da cuenta la obsesión...
De inicio, si
analizáramos desde
cuando el hombre tiene
miedo, ciertamente
llegaríamos a la edad de
la piedra lascada, con
nuestros ancestrales
refugiándose en los
fondos de las cavernas,
ante los grandes
peligros de los rayos,
de los truenos, de los
huracanes, de los
volcanes, de los
terremotos, de los
maremotos, de los
eclipses cósmicos etc.
Tales acontecimientos,
hoy bien explicados,
antaño eran tenidos como
sobrenaturales y
determinados por dioses
terribles, vengativos.
Holocaustos, ofrendas y
promesas comenzaron allí
y por lo que parece aún
no aplacaron la cólera
de aquellos dioses...
Vamos a catalogar en
este artículo algunas
especies de miedo.
Miedos naturales
- Son aquellos miedos
con los cuales,
prácticamente, todos
nacemos con ellos...
Fuego / Grandes ruidos /
Desequilibrios /
Muerte-muertos / (de lo)
Desconocido.
OBS: Decir que todos
nacen con miedo a la
muerte o de los muertos
remite, a los
occidentales, a la
infancia, cuando aún,
sin despertar del todo
la razón, ven a los
familiares con grandes
sufrimientos en
velatorios y entierros
de parientes o amigos,
con eso
inculcando/instalando en
el subconsciente
infantil que aquello (la
muerte) es terrible…
Miedos amigos -
Los llamados “miedos
amigos” son aquellos
dictados por la
prudencia y básicamente
son por ellos que los
seres vivos mantienen su
integridad, como por ej.
- el vegetal: busca la
luz y el agua, por lo
que, de forma indirecta,
está evitando la sombra
y la sequía, régimen en
el cual fallecería;
- el animal: huye de un
depredador o del combate
en el cual esté en
desventaja, y no lo hace
por cobardía, sino para
continuar viviendo;
- el hombre: en un grado
que va al infinito, ya
que la inteligencia abre
un abanico de infinitas
astas de opciones,
siempre evitará la
acción de consecuencias
perjudiciales; por ej.
no se excederá en la
curva, no jugará al
borde del precipicio, no
encenderá fósforos
próximo a combustibles
etc.
Afirmamos, enfáticamente,
que esos no son miedos,
sino, sí, frutos de la
prudencia, dictada por
el bendecido instinto de
conservación, engendrado
por Dios y que nace con
todas las criaturas.
Miedos enemigos -
Son los que causan
perjuicios al ser
humano, no por alguna
acción, sino justamente
al contrario, por la
inacción, como por ej.
- miedo de cambios: es
un archi-enemigo de toda
la Humanidad; en un
ambiente de trabajo o de
reuniones, por ej.,
miedo de cambiar de
lugar personas/objetos/muebles...
- miedo de enfrentar
desafíos de la vida,
tales como asumir
responsabilidades (sean
familiares,
profesionales, sociales).
Miedos irracionales
- Son aquellos
sentimientos que
bloquean el razonamiento
y se edifican sobre
bases que contrarían el
bueno sentido, como por
ejemplo:
- “miedo de ir al
dentista” — vean bien,
que lo que se dice no es
“tener miedo de ser
sometido a un
tratamiento
odontológico”, y sí, “de
ir al dentista...”.
Ahora: si un padre
contara a su hijo (desde
niño) que antiguamente
eran necesarias seis
personas para extraer un
diente (cinco para coger
al paciente y una sexta
persona para usar el
alicate), ciertamente
ese hijo, durante su
vida, será el primero en
buscar al dentista, en
la saludable lucha de la
“visita de prevención”.
Si es necesario
tratamiento, tal vez
hasta exija “inyección”
(anestesia), para no
sentir un pinchazo…
Miedos reales -
Se sitúan entre las
inquietudes que sigue
después de un trauma,
como por ejemplo:
- asalto: alguien es
asaltado y pasa a tener
recelo de volver a ser
víctima; como defensa
deja de salir de casa,
hasta casi recluirse por
completo; lo correcto
sería continuar
normalmente saliendo,
pero con cuidado
replegado; y, si vuelve
a ser asaltado, con
certeza ya tendrá mucho
más equilibrio para
proceder sin riesgos;
- hablar en público:
alguien dice algo para
algunas personas y es
ridicularizado... Ahí se
implanta tal miedo;
pero, si la persona
entrena, aunque sea en
el cuarto de baño,
frente al espejo, y
después para la familia,
verá que en breve
dominará esa técnica, no
siendo necesario ser un
brillante orador, pero
sí alguien que habla con
claridad;
- infección: siempre
lavando las manos es
excelente tal cuidado;
sólo habrá problema si
hay exageración…
- “viajar en avión”: de
hecho, desastres aéreos
ocurren, pero el avión
es decenas o centenares
de veces más seguro que
los automóviles...
OBS.: Generalmente, esos
miedos se transforman en
manías, de ahí en
fobias, después en
neurosis, pudiendo
evolucionar para
psicosis...
Miedos imaginarios
- Falsos sentimientos,
pues aún no ocurrieron,
pero ya viven en la
mente, como si fueran
reales. Considerando que
el hombre formula
pensamientos, cuya
fijación los convierte
en “realidad” mental,
surge aquí — sólo entre
nosotros, hombres — el
miedo imaginario, es
decir, temor de algo que
aún no ocurrió. Ese es
el más perjudicial de
los miedos, pues el
miedo real, muchas veces,
tiene raíces en el
pasado, expresándose en
el presente. Ahora: ¿cómo
tener miedo de algo que
aún no ocurrió?
Ejemplos:
- un estudiante (o muy
delgado, o de poca
estatura, o con gafas, o
algo obeso) trae en
estado latente el recelo
de no ser aceptado y con
eso evita ser rechazado;
- un joven que sufre,
con antelación, la
angustia de no conseguir
novia...
- un distribuidor que
desde la infancia no
haya sido esclarecido
que los dentistas
existen exactamente para
quitar “el dolor de
diente” y no para causar
dolor; ese distribuidor
tendrá recelo hasta de
ir a entregar una pizza
al desgraciado del
profesional allá en su
consulta, que casi no
tiene tiempo para una
alimentación tranquila,
de tanto que necesita
trabajar para sobrevivir…
- miedo a terroristas:
el nível de miedo puede
alcanzar la fase del
pavor, muy común en las
personas que sufren el
“síndrome del pánico”.
OBS.: Síndrome del
pánico: la expresión es
originaria de Pan, dios
griego, tocador de
flauta, que aterraba a
los campesinos con sus
cuernos y pies de
equinos; los pacientes
que presentan ese
síndrome sufren
intensamente, con graves
síntomas, que van de la
angustia a palpitaciones,
sudores, temblores,
falta de aire, nauseas,
miedo de la locura y
miedo extremo con
sensación de muerte.
En los Estados Unidos,
el trauma post 11 de
septiembre de 2001 (derrumbada
las “torres gemelas” por
terroristas) llevó
incluso la propaganda a
colocar máscara contra
gases en la famosa
muñeca “Barbie”...
Fobias - La fobia
es acompañada de un
miedo exagerado y
persistente (mórbido)
que no tiene límites en
relación a las causas
que lo producen. El
fóbico sufre
terriblemente. El
ejército de miedos, en
ese nivel, es casi
ilimitado.
(Continúa en la próxima
edición.)
(1)
Instrução do Governador
– In: “Nosso Lar”, André
Luiz/FCX, Cap. 42, pg.
230, 48ª Ed., 1998, FEB,
Rio/RJ.
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