En la cuestión
234 del Libro de
los Espíritus,
Allan Kardec
formuló la
siguiente
pregunta a los
Espíritus
Instructores, en
el ítem “Mundos
Transitorios”,
cuando aborda
cuestiones
relativas a la
“Vida Espírita”:
– “¿Hay de
hecho, como ya
fue dicho,
mundos que
sirven de
estaciones o
puntos de reposo
a los Espíritus
errantes?” Y la
respuesta de los
Instructores de
la Humanidad:
“Sí, hay mundos
particularmente
destinados a los
seres errantes,
mundos que les
pueden servir de
habitación
temporal,
especies de
acampadas de
campos donde
descansen de una
demasiado larga
erraticidad,
estado este
siempre penoso.
(...)”.
Es claro que,
como son
graduales las
revelaciones de
los Espíritus
Superiores a la
humanidad, ellos
no podrían, en
1857, hablar de
comunidades de
Espíritus
errantes, es
decir, de
Espíritus que
aguardan nuevas
reencarnaciones
hasta llegar a
la perfección
espiritual,
habitando
ciudades
estructuradas en
edificaciones de
naturaleza
sólida en la
atmósfera
terrestre sobre
terreno fértil a
la vegetación, y
en todo con
estrecha
semejanza al que
conocemos en la
superficie.
Sería bien
posible que los
adversarios del
Espiritismo,
delante de esa
revelación, y de
tamaña herejía,
mandaran
reavivar
ciertamente una
hoguera
inquisitorial
para quemar a
Allan Kardec
cómo hereje.
Ahora, en los
idos de 1980,
cuando estuve
personalmente
con Chico
Xavier, en su
casa en Uberaba,
él me contó que
cuando estaba
psicografiando
el libro Nuestro
Hogar, en la
década de 1930,
fue tachado de
“médium
fascinado”, y
que él aún quedó
muy confuso con
toda aquella
situación. Pero,
para deshacer
todo eso, el
Benefactor
Espiritual André
Luiz lo llevó,
en
desprendimiento,
a un punto bien
por encima de
“Nuestro Hogar”,
para que él
viera de arriba
la ciudad, y
pudiera
constatar la
realidad de lo
que estaba
psicografiando.
En ese momento,
Chico me
esclareció, aún,
que lo que él
vio en aquella
noche está
exactamente
diseñado en el
mapa de la
planta baja de
la colonia, por
la médium
Heigorina Cuña,
presentado en el
libro Ciudad en
el Más Allá.
COLONIA EM
ISRAEL
En el libro
Cuando se
pretende hablar
de la vida,
el joven, de
formación
israelí, Roberto
Muszkat,
desencarnado eL
14 de marzo de
1979, presenta
22 mensajes
psicografIadOs
por el médium
Chico Xavier,
dirigidos a sus
padres y
familiares. En
el mensaje del
16 de noviembre
de 1979,
relatando para
la madre su
desligamiento
del cuerpo, él
dice de la ayuda
de su abuelo
Moszek Aron, el
cual, al
pronunciar las
palabras
“Leshaná Habaá
bi -
Yerushalayim”
(era un adiós,
significando: el
año que viene en
Jerusalén), lo
tranquilizó y lo
hizo dormir como
un niño.
Cuando despertó,
se vio en un
lecho blanco con
su abuela Rachel
velando por él.
Tras algún
tiempo, su
abuelo Moszek
fue a su
encuentro,
llevándolo al
encuentro de
otros Espíritus
amigos para un
recinto dedicado
a la oración, en
la amplia
escuela-hospital.
Esos amigos
cantaron el
himno Shalom
Aleichem (himno
que da la
bienvenida a los
ángeles de la
paz, cantado el
viernes a la
noche) y el
abuelo,
enseguida, lo
bendijo. Las
lágrimas bañaron
su rostro,
mientras el
abuelo promovía
el Seder
(reunión festiva
en la primera y
segunda noche de
la Pascua
judaica), en
cuya reunión
tuvo la
oportunidad de
hacer muchas
preguntas.
Dice aún
textualmente en
el mensaje el
Espíritu Roberto
Muszkat: “Vine a
saber, entonces,
que me hallaba
en Erets Israel
(Tierra de
Israel), o
Tierra del
Renacimiento,
cuya belleza es
indescriptible.
Allí, en aquella
provincia del
Espacio
Terrestre, se
erguía otra
ciudad luminosa
de los Profetas
(...). Con estas
indicaciones no
quiero decir que
estaba en una
ciudad
privilegiada,
porque otras
naciones las
poseen en las
esferas que
cercan el
Planeta, pero
aquel rincón era
mi corazón
latiendo con
miles o millones
de otros
corazones,
consagrados al
Padre Único”.
COLONIA DE
CASTREL
Esa colonia
espiritual está
citada en el
libro La vida
más allá del
velo,
dictado por
varios
Espíritus,
recibido por la
escritura
mediúmnica
mecánica del
reverendo inglés
G. Valle Owen,
editado por la
Federación
Espírita
Brasileña (FEB),
traducido por
Carlos Imbassahy.
Esa Colonia
espiritual,
cuyas
informaciones
nos llegaron con
la primera
edición del
libro arriba
citado (1920),
tiene como tarea
básica la
atención a la
infancia. Recibe
Espíritus
desencarnados en
la infancia, los
prepara para la
nueva realidad
de la vida, los
reintegra a los
planes que les
son destinados
después de haber
retornado a la
forma adulta, o
prepara
Espíritus para
reencarnación,
acompañándolos
en la fase
infantil.
A pesar de que
el lenguaje
predominante en
el libro no sea
actual, es una
obra de lectura
agradable, que
mucho nos
esclarece. La
Colonia, situada
entre montañas,
posee una cúpula
dorada en el
centro, cercada
por una terraza
llena de
columnas. Una
larga calle
corta la ciudad
de un extremo al
otro, formando
una alameda,
donde están
localizadas las
residencias de
sus dirigentes.
Hay muchos
terrenos,
espaciosos
edificios y
construcciones
para la atención
al niño. Viven
ahí muchos
trabajadores del
campo, dedicados
a la
horticultura, y
muchos de la
ciudad,
dedicados a
tareas junto a
la infancia. Es
una localidad
muy bella e
iluminada; hay
muchas fuentes
de agua y
predominancia de
ambiente
armónico. El
deseo del bien
es la nota
reinante.
COLONIA
CORRECIONAL DE
LA LEGIÓN DE LOS
SIERVOS DE MARÍA
El libro
Memorias de un
suicida,
relatado por el
Espíritu Camilo
Cândido Botelho,
por la
mediumnidad de
Yvonne A.
Pereira,
describe la
Colonia
Correccional de
la Legión de los
Siervos de
María, una obra
evangélica y
asistencial que
atiende
suicidas. Sus
dirigentes y
servidores
actúan en nombre
de María
Santísima, su
mentora y
orientadora
mayor.
La Colonia es
representada por
una fortaleza,
cercada por un
conjunto de
murallas
fortificadas,
situada en una
región triste y
desolada,
envuelta en
neblinas como si
todo el paisaje
fuera recubierto
por el sudario
de continuadas
nevadas, si bien
ofreciendo
posibilidades de
visión. Esa
fortaleza
recuerda los
castillos
medievales, con
foso, torres y
puente movedizo.
Dentro de la
fortaleza hay
incontables
edificios con
sus respectivos
departamentos de
servicios, que
se despliegan,
constituyendo
una verdadera
ciudad en las
regiones
tenebrosas,
ofreciendo al
Espíritu suicida
la asistencia
necesaria al
comienzo de su
erguimiento
moral.
EL HOGAR DE LA
BENDICIÓN
El Espíritu
André Luiz, en
el libro
Entre la Tierra
y el Cielo,
revela, por la
psicografia de
Francisco
Cândido Xavier,
edición de la
FEB, que el
Hogar de la
Bendición es una
importante
Colonia
educativa,
mezcla de
escuela de
madres y
domicilio de los
pequeñitos que
regresan de la
esfera carnal.
Esa Colonia,
situada en el
espacio
espiritual
correspondiente
a las tierras
brasileñas,
tiene como
objetivo
preparar madres
para la
maternidad
responsable y
atender a los
niños que
desencarnan y
reencarnan.
Informa André
Luiz, aún, que
tales niños
encuentran ahí
el apoyo
necesario a su
reajustamiento
espiritual. Así
es que, en los
primeros
momentos, como
liberados del
cuerpo físico, o
mientras les
dure el
desequilibrio,
son bendecidas
por la
asistencia
superior y amiga
de los
benefactores
espirituales del
Hogar de la
Bendición y por
el afecto
inolvidable de
aquellas que
fueron sus
madres, las
cuales, aún
presas a los
lazos de la
carne, son, sin
embargo,
llevadas a la
Colonia para
auxiliar y
acompañar el
erguimiento de
los hijos.
MANSIÓN
PAZ
La Mansión Paz
es una escuela
de reajuste
espiritual, bajo
la jurisdicción
de “Nuestro
Hogar”. El
Espíritu André
Luiz así se
expresa sobre
ella en el libro
Acción y
Reacción,
psicografIado
por Francisco
Cândido Xavier,
publicado por la
FEB: “El
establecimiento,
situado en las
regiones
inferiores, era
bien una especie
de “monasterio
San Bernardo´;
en una zona
castigada por
naturaleza
hostil, con la
diferencia de
que la nieve,
casi constante
en torno al
célebre convento
enclavado en los
desfiladeros
entre Suiza e
Italia, era allí
sustituida por
la sombra
espesa, que se
adensaba, movida
y terrible,
alrededor de la
institución,
como tocada por
vientos
incesantes”.
Según André Luiz,
es una
institución
destinada a
recibir
Espíritus
infelices o
enfermos, pero
decididos a
trabajar por la
propia
regeneración,
criaturas esas
que se elevan a
colonias de
perfeccionamiento
en la Vida
Superior o que
retornan a la
esfera de los
hombres para la
reencarnación
rectificadora.
LOS PUESTOS DE
AUXILIO
Los Puestos, o
Núcleos de
Auxilio, están
situados en las
Esferas
inferiores de la
región
espiritual.
Representan un
campus avanzado
de una colonia
espiritual,
conforme nos
informa Conan
Doyle en la obra
Historia del
Espiritismo. Los
Espíritus
esclarecidos y
dedicados al
bien realizan en
esas localidades
trabajos
misioneros,
caracterizados
por grandes
dificultades y
peligros,
semejantes a los
que rodearían al
hombre que
intentara
evangelizar a
los más salvajes
grupo étnicos
existentes en la
Tierra.
Los Espíritus
misioneros
traban luchas
arduas con los
habitantes de
las regiones
tenebrosas,
principalmente
con sus
dirigentes,
verdaderos
príncipes del
mal, que son
formidables en
sus propios
reinos. Esas
Esferas son las
salas de espera
— hospitales
para almas
enfermas — donde
la experiencia
punitiva es
intentada para
traer al
sufridor a la
salud y a la
felicidad.
PUESTOS DE
SOCORRO “CAMPOS
DE LA PAZ”
“Campo de la
Paz” es un
puesto de
socorro
localizado en
pleno Umbral que
tiene como
misión recibir
Espíritus
enfermos, más
desequilibrados
que malos, por
el choque de la
muerte física,
por el apego
relativo que aún
demuestran tener
a las personas y
cosas dejadas en
la Superficie.
Esa información
está en el libro
Los
Mensajeros,
dictado por el
Espíritu André
Luiz,
psicografiado
por Chico Xavier
y publicado por
la FEB. En ese
Puesto, los
desencarnados
son recibidos,
tratados,
reajustados y
después
encaminados a
otros Planos.
Muchos de esos
Espíritus llegan
al Núcleo de
Auxilio
completamente
dementes, ajenos
PUESTOS DE
AUXILIO MÓVILES:
“LA CASA
TRANSITORIA DE
FABIANO”
La finalidad
esencial de la
Casa Transitoria
es prestar
auxilio urgente
y, debido a su
localización en
plena región
tenebrosa, sufre
permanente cerco
de Espíritus
desesperados y
sufridores,
condenados por
la propia
conciencia a la
revuelta y al
dolor. Es un
refugio móvil
que, para
garantizar sus
defensas
magnéticas,
exige gran
número de
servidores y de
amigos piadosos,
que ahí
permanecen, día
y noche, al lado
del sufrimiento.
Informa el
Espíritu André
Luiz, en el
libro Obreros
de la Vida
Eterna,
psicografiado
por Francisco
Cândido Xavier
editado por la
FEB, que el
trabajo de esa
Casa es de los
más dignos y
edificantes. En
ese edificio de
beneficencia
cristiana se
centralizan
numerosas
expediciones de
hermanos leales
al bien, que se
dirigen a la
Superficie
Planetaria o a
las esferas
oscura, donde se
debaten en el
dolor seres
angustiados e
ignorantes, en
tránsito
prolongado en
los abismos
tenebrosos.
Dice aún el
Benefactor
Espiritual André
Luiz tratarse de
una gran
institución
piadosa, en el
campo de
sufrimientos más
duros en que se
reúnen almas
recién
desencarnadas,
en las cercanías
de la Superficie
Terrestre, la
cual fue fundada
por Fabiano de
Cristo, dedicado
siervo de la
caridad entre
antiguos
religiosos de
Río de Janeiro,
desencarnado
hace muchos
años. Organizada
por él, era
confiada,
periódicamente,
a otros
benefactores de
elevada
condición, en
tarea de
asistencia
evangélica,
junto a los
Espíritus recién
desconectados
del Plano
carnal. La Casa
Transitoria de
Fabiano es un
Puesto de
Auxilio móvil,
que se traslada
cuando se hace
necesario, a lo
largo de las
regiones
umbralinas.
CONCLUSIÓN
Delante de esas
informaciones,
creo que deban
existir miles de
colonias en
torno a la
Tierra, cada una
reuniendo
Espíritus
afines, en
consonancia con
la raza,
religión,
cultura,
progreso moral
etc.
Admitiéndose que
alrededor de la
Tierra viven en
torno a 13 mil
millones de
Espíritus
desencarnados, y
dividiendo por
un millón de
Espíritus en
cada colonia
(tomando por
base la
población de
Nuestro Hogar),
tendremos como
mínimo 13 mil
Colonias
esparcidas por
todo el espacio
en torno a la
Tierra, fuera
los puestos de
auxilio
vinculados a
esas Colonias.
Ahora, si
dependiéramos de
la
oficialización
de la Ciencia
humana para
comprobar la
existencia de
colonias
espirituales y
puestos de
auxilio en el
Mundo
Espiritual,
recordemos que,
si Allan Kardec
necesitara de la
confirmación
científica de la
existencia del
alma o de la
reencarnación
para publicar
El Libro de los
Espíritus,
hasta hoy él
estaría
aguardando el
pronunciamiento
oficial y por
mucho tiempo
aún. Finalmente,
no podemos
perder de vista
el aspecto
REVELADOR del
Espiritismo, que
se anticipó al
conocimiento
humano acerca de
la existencia
del alma, de la
reencarnación,
inclusive la del
periespíritu.
Gerson Simões
Monteiro é
presidente da
Funtarso,
operadora da
Rádio Rio de
Janeiro.
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