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concedió
la
siguiente
entrevista: |
¿Cuándo y en qué
circunstancias
tuvo usted su
primer contacto
con la Doctrina
Espírita?
Asistía, desde
tierna edad, a
colegios
dirigidos por
sacerdotes (mis
padres eran
católicos) y,
por lo tanto,
desde temprano
estuve en
contacto con el
lado místico de
la existencia;
como cualquier
joven, mi
curiosidad por
todo lo que
estaba
relacionado con
la
espiritualidad
despertó
temprano, entre
los 15 y los 16
años: oíamos
hablar del juego
de las tazas, el
juego de las
plumas y el
experimentar es
la tendencia
natural de los
jóvenes
inexpertos - ¡y
yo no fue la
excepción!
Más tarde,
durante el
servicio
militar, aún no
sabía nada de
Espiritismo,
pero
practicábamos
(yo y los demás)
“experiencias
con los
espíritus” -
¡hasta coger un
gran susto!
Recién en 1980,
a través de
amigos, vendría
tomar contacto
con un Grupo que
estudiaba las
obras de Kardec
y, desde
entonces, me
intereso cada
vez más en esta
filosofía de
vida.
¿Cuáles son
actualmente sus
actividades en
el ámbito
espírita?
Actualmente
ejerzo el cargo
del presidente
de la Dirección
en la Federación
Espírita
Portuguesa,
aunque estoy
ligado a los
cargos
directivos de la
Casa Mater desde
1986.
En Algarve,
estoy ligado a
cuatro Casas
Espíritas que
ayudé a crear,
donde
desarrollamos
las actividades
habituales de
una Casa
Espírita:
Atención,
Estudio,
Evangelización,
Guía Espiritual,
Irradiación a
Distancia.
¿Cuál de los
tres vértices de
la Doctrina
Espírita -
Ciencia,
Filosofía y
Religión- le
atrae más y por
qué?
A pesar de que
me deslumbran
las partes
científica y
filosófica, es
sobre todo la
parte religiosa
la que me atrae
más, porque a
través de ella
encontré
finalmente las
respuestas a
preguntas
existenciales
que de otra
manera no tenían
sentido para mí.
Hasta el
momento, ¿ha
habido algún
hecho resaltante
en su vivencia
espírita?
Los hechos
resaltantes son
muchos y
frecuentes, ya
sea en la vida
física o a
través de los
trabajos
mediúmnicos.
Tengo la
felicidad de
relacionarme de
cerca con
algunos médiums
a través de los
cuales he
presenciado
experiencias de
tal forma
sublimes que,
obligatoriamente,
nos hacen
repensar todo lo
que creemos que
sabemos, todo lo
que creemos que
somos,
llevándonos a la
transformación
interior.
Cuéntenos como
anda el
Movimiento
Espírita en
tierras
lusitanas.
El Movimiento
Espírita en
Portugal fue
prácticamente
extinguido
durante la
dictadura y sólo
vino a
reorganizarse
después de la
revolución en
1974. Es, por lo
tanto, un
movimiento
reciente, pero
con una
expresión
significativa:
somos casi 70
Casas Espíritas
federadas, pero
sabemos que hay
más de 250
grupos que se
juntan y
desarrollan
actividades.
Así como en todo
el mundo, la
espiritualidad
despierta con
celeridad y los
valores tienden
a alterarse para
mejor - ¡eso es
lo que me parece
importante!
En este momento,
cuando miles de
refugiados de
guerra buscan en
Europa un lugar
seguro para
vivir, ¿cómo
cree usted que
los espíritus
europeos, a
través de la
Doctrina
Espírita, pueden
auxiliarlos?
Este movimiento
de personas y
valores que son
transportados a
través de ellas
es muy
significativo. A
mi parecer, nada
ocurre por
casualidad y
Europa recibe
ahora el
resultado de
invasiones
anteriores.
Nosotros que
conocemos la Ley
de Causa y
Efecto, sabemos
que la forma más
eficaz de
ayudar, más allá
del apoyo
material que
pueda ser dado,
es siempre a
través del
respeto y del
ejemplo.
El año pasado,
se realizó en
Portugal el 8º.
Congreso
Espírita
Mundial. Sabemos
que usted fue
uno de los
organizadores y
que el evento
fue muy elogiado
por su óptima
organización.
¿Podría
contarnos los
desafíos y las
recompensas
obtenidos en ese
evento de gran
importancia para
el movimiento
espírita
mundial?
Organizar el 8º.
Congreso
Espírita Mundial
fue un gran
desafío.
Contamos con un
equipo reducido
de trabajo
durante más de
dos años,
mientras todo
fue pensado,
seleccionado y
se tomaron las
decisiones.
La crisis
económica que
asoló el Brasil
fue un factor
inesperado para
la organización
de este
Congreso, pero
gracias a todo
el apoyo que
tuvimos de la
Espiritualidad,
todo acabó con
un buen
resultado.
Durante los tres
días del
Congreso casi
una centena de
voluntarios se
unieron al
equipo de
organización y a
los más de 2,000
congresistas.
Fueron momentos
de mucha
emoción, de
intercambio de
sentimientos y
conocimientos
que aún hoy
vibran en mi
ser, cuando los
recuerdos o
cuando vuelvo a
ver las
grabaciones
están
disponibles on
line, para quien
las quiera
apreciar: www.adep.pt/cem
Tuvimos el honor
de homenajear
algunas figuras
que nos
impresionaron
por su ejemplo:
Néstor Masotti y
Nilson de Souza
Pereira, así
como otras que
aún están entre
nosotros:
Divaldo Franco y
Raúl Teixeira.
Una gran alegría
llenó mi corazón
y sentí que esa
alegría era
compartida por
los que, en el
encuentro,
dejaban correr
las lágrimas y
se abrazaban
emocionadas -
ésa fue mi mejor
recompensa:
¡desde Portugal,
al igual que en
los tiempos de
los
descubrimientos,
volvieron a
partir corazones
llenos de
esperanza!
Déjenos una
frase, una
palabra o un
pensamiento que
traduzca el
valor que la
Doctrina
Espírita tiene
en su vida.
La Doctrina
Espírita es la
razón de mi
existencia.
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