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Año 2 – 102 – 12 de Abril del 2009
ANTONIO AUGUSTO NASCIMENTO  
acnascimento@terra.com.br
Santo Ângelo, Rio Grande do Sul (Brasil)
Traducción:
ISABEL PORRAS GONZÁLES - isy@divulgacion.org  
 

Nilton Stamm de Andrade:

 “La casa espírita debe ser transparente en sus relaciones con la sociedad y el gobierno”
 

Ex-presidente de la Federación Espírita de Rio Grande do Sul, con medio siglo de servicios prestados a la causa espírita, Nilton Stamm de Andrade (foto) nos relata, en esta entrevista, su trayectoria y teje consideraciones oportunas en cuanto al papel de la casa espírita en el mundo actual. Jubilado, después de una exitosa carrera en el Banco de Brasil, aguarda junto a su esposa Graça, la llegada de los nietos y continúa, valiente, sirviendo con entusiasmo en varios sectores de actividad en el Movimiento Espírita gaucho.

El Consolador: ¿Cómo se volvió espírita usted?
 

Desde la infancia recibí los bienes de la orientación espírita. Mi padre, José Nunes de Andrade, espírita convencido, trabajador incansable de la Sociedad Espírita Benéfica de Sebastián León, de San Leopoldo (RS), siempre ejerció una fuerte influencia sobre mí, especialmente por su amor a la Doctrina y por su ejemplo personal. Hoy, transcurridos tantos años, tengo pleno entendimiento de que fue decisivo, para que yo me volviese espírita, el simple hecho de haber ingresado en 1958, en la entonces denominada Juventud Espírita Leopoldense. El grupo, orientado por mi padre, estaba constituido por jóvenes de ambos sexos, todos oriundos de varias casas espíritas de la ciudad. Fue una experiencia que me marcó, motivadora también. De ahí en adelante, mi envolvimiento con las denominadas Confraternizaciones de las Juventudes Espíritas de Rio Grande do Sul, que en la época ocurrían anualmente en el Estado, promovidas por la Federativa Estatal, teniendo al frente, en el Sector de Juventud, al inolvidable Alberto Rocha, consolidaron indeleblemente mi camino en la siembra espírita. En aquellos días, fue forjado poco a poco, mi desarrollo interesado por el Movimiento Espírita y el cariño por nuestra amada y venerada Doctrina.

El Consolador: ¿Se vincula a qué instituciones?

Desde el año 1976 frecuento la Sociedad Espírita Amor a la Verdad, de San Leopoldo, en la cual ingresé por no estar de acuerdo con los acontecimientos, en aquella época, en desarrollo en la Sociedad Sebastián León, desarrollando actividades con el magnetismo y sesiones de cromoterapia.

El Consolador: ¿Tiene artículos publicados? ¿En qué órganos?

Artículos propiamente dichos, en verdad, no publiqué. Tengo sólo algunas tímidas arremetidas en este campo, publicadas en la revista “La Reencarnación”, de la Federativa Estatal. Siempre estudié el Espiritismo. Permanezco estudiando e investigando. Considero relevante todavía mi colaboración en el proyecto, investigación y estructuración de los boletines editados por el Centro de Entrenamiento y Estudio (CTE) de la Federación Espírita do Rio Grande do Sul, creado en la gestión del presidente Jason Camargo (1992-1993), buscando capacitar a los colaboradores para las actividades rutinarias en las instituciones espíritas. Era la implantación de una visión operativa, de carácter práctico y que se sumaba a los estudios doctrinarios propiamente dichos. Colaboré igualmente, con las investigaciones que envolvieron la publicación de la obra “Educación de los Sentimientos”, de Jason Camargo, ex presidente de la FERGS.

El Consolador: ¿Cargos ya ejercidos en el movimiento espírita o actualmente ejerciendo?

En estos 50 años de actuación en el Movimiento Espírita, ocupé cargos de secretario y presidente de casas espíritas y órganos unificadores. En el año 1998 asumí la presidencia de la Federación Espírita do Rio Grande do Sul, siendo reelegido para el mandato 2000/2001. Actualmente ejerzo el cargo de presidente del Consejo Regional Espírita de la 2ª Región Federativa, habiendo sido reelegido para el bienio 2000/2010.

El Consolador: ¿En qué actividades actúa en el Centro Espírita?

En la Sociedad Espírita Amor a la Verdad, en el presente, actúo como Director Doctrinario. Ayudo en el auxilio fraterno, soy preparador de grupo de estudio y expositor doctrinario.

El Consolador: En el Movimiento Espírita usted es muy solicitado como conferenciante para seminarios y conferencias, tanto para trabajadores como para el público. ¿Qué temas prefiere abordar y cómo siente la repercusión de esas actividades?

El Espíritu Emmanuel, en un determinado mensaje, asevera que “el Centro Espírita es una escuela, donde vamos a aprender a enseñar, plantar el bien, cogerles los beneficios, perfeccionándonos y perfeccionando a los otros en la senda eterna”. Delante de este objetivo concepto, considero que se hace imprescindible llevar a los trabajadores espíritas, a los asistidos e incluso para el público en general, la noción de que más que nunca es fundamental estudiar el Espiritismo. Todos los temas levantados por las obras básicas, especialmente en “El Libro de los Espíritus”, deben ser objeto de conferencias y de seminarios, aun dejando trasparecer para los diferentes públicos que el principal objetivo del Espiritismo en la Tierra se resume en la transformación moral de la humanidad y en el dominio de las imperfecciones, herencias del estado de naturaleza. El Espiritismo es una doctrina eminentemente educadora. Aprendemos que cada Espíritu va construyendo, en el día a día, a través de los milenios, las virtudes y las victorias sobre sí mismo, educándose, en la búsqueda de la perfección relativa. Por otra vertiente, deberán ser objeto de conferencias, de cursos y de seminario, legítimas oportunidades de aprendizaje y momentos de reflexión, las actividades operativas en la institución espírita, como por ejemplo, los pases, la atención fraterna, las exposiciones doctrinarias.

 Es necesario reafirmar constantemente “el cómo hacerlo”, que se configura como el ajuste de las acciones y rutinas diarias de la casa a los postulados firmados en las obras básicas, concluye la respuesta aseverando que la repercusión de esas actividades serán valerosas si son conducidas con seriedad, cualidad y perseverancia. Será muy útil para los espíritas comprender que la institución en que militamos es vista por los Benefactores como una escuela, un centro formador de conciencias iluminadas por la fe racional, por la educación moral y, en especial, por la potencia del amor y que su venerable currículo es el bien.

El Consolador: ¿Alguna situación especial que le gustaría compartir?

Sí. La sensible cuestión de la dirección administrativa de los Centros Espíritas. Se trata, aun, de uno de los diversos puntos de dificultad en el Movimiento Espírita Brasileño. Nótese: buena administración es el sinónimo de resultados positivos. La afirmación equivocada, infantil porque la casa espírita no es una empresa y, por tanto, no debe adoptar instrumentos utilizados por la moderna ciencia de la administración, en estos tiempos en que los cambios tecnológicos y avances científicos de todo orden imponen transformaciones en el día a día de la sociedad humana, viene causando atrasos considerables en la formación de dirigentes espíritas eficientes y eficaces. Formación de líderes capaces de llevar a sus respectivos centros espíritas resultados efectivos, en calidad y en cantidad. En número considerable de nuestras instituciones los resultados son bajos, el más grave debido al desarrollo escaso o inexistente de las casas y de sus respectivos colaboradores, persisten los “dueños de los centros espíritas”, perdedores del progreso, de las oportunidades, de las relaciones múltiples, conduciendo sus instituciones al aislamiento, en dirección contraria a los ideales de la Unificación.

El Consolador: ¿Qué piensa sobre las exigencias legales que han aumentado para las instituciones espíritas?

No nos cabe juzgarlas, sino cumplirlas. A propósito, la casa espírita debe ser extremadamente transparente en sus relaciones con la sociedad organizada y con los poderes públicos. Incluso si no estamos de acuerdo con las cosas, con determinados hechos y normas, siempre existirán canales para alcanzar las justas reivindicaciones, apelándose para la justicia de los hombres, sin embargo no olvidando jamás la influencia de la Ley de Causa y Efecto en nuestras vidas. El Maestro Nazareno aseveró a los fariseos que se debe “dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”, dictado ampliamente analizado en “El Evangelio según el Espiritismo”, capítulo XI, ítem 5, y que siempre deberá merecer nuestro análisis y, en consecuencia, las acciones adecuadas. 

El Consolador: Háblenos de la motivación para abordar temas relacionados a la administración del Centro Espírita.

A lo largo de estos más de 150 años de Codificación vivimos diferentes etapas, superando dificultades y alcanzando conquistas. Los dirigentes de las casas espíritas, personas abnegadas y trabajadoras, mucho realizaron y realizan para que el Movimiento Espírita se ampliase y continúe a ampliarse en tierras brasileñas, llevando la luz del Consolador para millones de criaturas. Mientras tanto, es imprescindible avanzar, dar continuidad, expandir la Siembra del Cristo. La administración de la sociedad espírita, en los días actuales, permanece siendo, en la mayoría absoluta de los casos y por encima de todo, una actividad de mucha dedicación y esfuerzo, compleja y variada. Depende casi exclusivamente de la colaboración de voluntarios, cuya parcela menor viene adquiriendo la conciencia espírita. Se suma a eso, casi siempre, la parca existencia de recursos financieros para el cumplimiento de los objetivos (no siempre bien delineados).

La tarea se volvió difícil, desafiadora incluso. En la práctica, eso significa decir que apenas el conocimiento y la vivencia doctrinaria, aliados a la buena voluntad y disposición, no son suficientes para hacer de alguien un “buen dirigente espírita”. Todos nosotros sabemos que, si pretendemos realizar un trabajo que produzca resultados efectivos en el centro espírita, es fundamental también organizar y viabilizar las propuestas de actividades de la casa, su estructura sectorial, las normativas, las modernas herramientas de gestión, la tecnología, de forma especial la informática, el perfil de los frecuentadores y de los propios trabajadores, elegir la visión sistémica, el planeamiento, el control y la evaluación continúa. Hecho eso, será preciso conciliar el deseo ardiente de proseguir, sirviendo con amor y hasta con sacrificio a la causa, se exigirá la capacitación para alcanzar una efectividad que no es nada más que la aplicación continuada de los conceptos de eficiencia y eficacia, respectivamente. En mi punto de vista, esa deberá ser la motivación de todo el espírita que tenga plena conciencia de los desafíos de nuestro tiempo, para perfeccionar la administración de nuestras instituciones.

El Consolador: ¿Cuáles son las ventajas para el equipo dirigente, y por consecuencia directa para la institución, en estar actualizada en técnicas de administración modernas?

Son dos. La primera dirigida para el equipo dirigente y los colaboradores. Operar con eficiencia y con eficacia en las diversas actividades, generando satisfacción en aquello que realizan y alcanzando, paulatinamente, significativos índices motivadores. La segunda sería dirigirla para la institución espírita. Conquistar resultados positivos en términos de cualidad en las diferentes actividades, en el aumento del número de trabajadores comprometidos con la causa y por la consecuente correspondencia del público frecuentador, lo que significa, en otras palabras, el desarrollo general. Aquí es fundamental comprender los conceptos de eficiencia y de eficacia. Por ejemplo, podemos afirmar que el dirigente espírita eficiente y eficaz, además de procurar relacionarse bien con su equipo de trabajadores, se preocupa igualmente, en hermanarse con los demás centros espíritas. Y es más: divulgar la Doctrina Espírita, más allá de los muros, esto es, divulgarla para toda la comunidad, inclusive para los no espírita, evidentemente, sin proselitismo y con respeto a las demás instituciones. Este es sólo un simple ejemplo. 

El Consolador: ¿En su evaluación, cuál es la importancia de los grupos de estudio en las casas espíritas?

La campaña del Estudio Sistematizado de la Doctrina Espírita (ESDE) fue concebida e implantada en Rio Grande do Sul en 1978. Como ya fue afirmado, el centro espírita es una escuela que tiene por finalidad esclarecer y consolar a las criaturas. Entonces, es fundamental que se vuelva un centro de estudio serio y metódico del Espiritismo, envolviendo a todos sus trabajadores, asistentes y demás frecuentadores. El mundo moderno se caracteriza por la valoración de las decisiones tomadas en grupo. Cuando el grupo analiza determinado asunto, la visión resultante es ampliada, enriquecida, liberándose sus miembros de las ideas subjetivas y personalistas. Aprender a trabajar en grupo es, pues, una necesidad que se afirma a los trabajadores de una institución espírita. Convencido de la necesidad del estudio doctrinario, el Consejo Federativo Nacional de la Federación Espírita Brasileña, a través de la norma “Orientación al Centro Espírita”, recomienda la implantación y el funcionamiento permanente de los denominados Grupos de Estudio Sistematizado de la Doctrina. La reunión de estudios es pues, aquella en que un grupo de personas regularmente se encuentra, buscando el estudio metódico, continuo y de forma participativa de la Doctrina Espírita, con una programación previamente elaborada, con base en la Codificación.

El Consolador: ¿Qué experiencia o lecciones tiene para relatar de estas actividades?

Estoy comprometido con la tarea de orientador de grupos de estudio desde el año 1985, en la Sociedad Espírita Amor a la Verdad. En estos años todos hemos notado los beneficios de ese trabajo que, más allá de repasar conocimiento doctrinario espírita para las personas, se revela como un sistema capaz de capacitar adeptos esclarecidos, ciertamente más conscientes. ¡Un secreto! En los grupos de estudio de éxito, quien más se “lucra”, es el orientador, pues es instado, por la conciencia, a preparar cualitativamente las reuniones, y en derivación, adquiere un conocimiento profundo. Por otro lado, el ESDE es capaz de forjar nuevos trabajadores. Siendo así, el conocimiento doctrinario es fundamental, una vez que la conquista de una conciencia espírita y, en consecuencia, del compromiso con la Causa, solidifica la propia vitalidad del Movimiento Espírita y la convicción de su correcta divulgación. De esta manera la adopción de la formula: conocimiento doctrinario más ESDE es imprescindible. Siempre busqué, con base en los cuadernos del ESDE, trabajar la dinámica de grupo propuestas en cada guía y utilizar la bibliografía de forma extensiva, trayendo las obras referidas para la sala de aula para ser manoseadas y consultadas con atención.

El Consolador: ¿Cómo analiza el estado actual del Estudio Sistematizado de la Doctrina (ESDE) en los centros espíritas?

Necesita ser revitalizado. Después de 30 años de campaña, con todo, el desgaste natural es un  hecho y el proceso necesita de la elaboración de nuevos objetivos, métodos y medidas en la capacitación de los orientadores. Comprendo el ESDE como una filosofía de trabajo que posee cinco ítems, a saber: 1) la necesidad de la aplicación constante de los conceptos pedagógicos y de la didáctica; 2) el estudio en grupo basado en la búsqueda del consenso, a fin de evitarse el subjetivismo y el personalismo; 3) el estudio regular y sistematizado, comprendiendo ese término como la necesidad de partir de los conceptos simples para los conceptos complejos; 4) la existencia de programas de previo conocimiento de los interesados, elaborados por la Federativa Nacional que, con todo, deben ser perfeccionados en términos didácticos y cuyas respectivas notas tengan su contenido reducido; 5) la flexibilidad en la duración de los cursos, respetándose las características y la productividad de cada grupo, pero igualmente, estando atento para las cuestiones que surjan y sean, de forma urgente y necesaria, tratadas en el grupo de trabajo.

El Consolador: ¿Cómo evalúa el momento actual de la divulgación del Espiritismo?

Está avanzando. La tecnología aplicada a los ordenadores, en especial a internet, han traído óptimos resultados en el proceso de divulgación del Espiritismo. Ahora mismo estamos constatando la amplía repercusión del programa televisivo “Transición”. Aunque enalteciendo esos auspiciosos eventos, considero que aun es fundamental el papel desempeñado por el libro espírita. ¡Todavía, atención! Existe una importante cantidad de obras “espíritas” lanzadas con pobre calidad doctrinaria, ¡buscando apenas fines comerciales! ¡Estas yo las denomino de “espiritadas”! son perjudiciales; sólo traen la desinformación y el misticismo. Su apelo es sólo comercial. En otro análisis, los programas radiofónicos se ven notables no sólo por el número, sino también en la corrección de los principios doctrinarios dirigidos. Vengo constatando que los denominados Departamentos de Comunicación Social en las casas y órganos unificadores vienen realizando una organizada y digna acción divulgadora. Subrayo. La preocupación, derivada, en toda la divulgación doctrinaria espírita siempre será la cualidad y corrección de aquello que se dirige. Finalizo la respuesta aseverando que, a pesar de nuestros esfuerzos y, de toda la tecnología disponible, la mejor divulgación que podemos hacer de la venerada Doctrina, siempre será nuestro propio ejemplo personal, dentro y fuera de la Casa Espírita.

El Consolador: ¿Cómo percibe el amigo los desafíos de la sociedad en transformación, como la crisis económica que asola el planeta?

Al sabor del egoísmo y del orgullo humano, el mundo se mueve de forma acelerada en dirección a diversas alternativas extremadamente difíciles y dolorosas. Entre ellas podemos escoger la crisis económica mundial, el colapso de la biosfera en sustentarnos o, hasta un ejemplo más, lejos de ser apartada, una hecatombe nuclear. Estamos todos en un recorrido cuyo nombre es sobrevivencia. Todavía, en el lado positivo de esa relación delicada, tenemos avances tecnológicos espectaculares. Notables procesos de transformación de las organizaciones privadas y públicas están en curso. Constatamos aun, que el nivel de conciencia de los derechos del ciudadano, del consumidor, de la mujer, del niño, de las minorías, y de tantos otros sectores han crecido en la onda de la introspección y del desenvolvimiento humano, en este proceso lento, pero inexorable, de la transformación de nuestro planeta en un mundo de regeneración. La ganancia y voracidad de pocos sobre muchos nada más es una infracción a la Ley Divina. La Ley de Causa y Efecto restablecerá, en el tiempo debido, el equilibrio desajustado por el hombre por sus acciones inconsecuentes, sean ellas forjadas por las individualidades, sea por el colectivo. Nuestro planeta es sólo uno de entre numerosas moradas en la casa de NUESTRO PADRE. Nada pasa por fruto del acaso. Amar, trabajar, confiar, esta es la receta delante de las dificultades y desafíos de la actualidad.

El Consolador: Y en cuanto a la constatación del creciente interés del público en general por el Espiritismo, ¿cuáles son las tareas que competen al dirigente de la Casa Espírita, para atender a los que llegan?

Número 1: cualificar doctrina y operativamente el trabajo espírita. Dentro del concepto de que el centro espírita es una escuela, sus trabajadores deben perfeccionar su conocimiento de la Doctrina para servir mejor, ya que conceptualmente son todos educadores. Los cursos de entrenamiento operacional (cómo hacerlo), enfocando la atención fraterna, los pases, la recepción y todas las demás actividades rutinarias, igualmente, deben recibir de los dirigentes la máxima atención.

Número 2: cualificar administrativamente la institución. No olvidar la importancia del Curso de Capacitación Administrativa, elaborado por la Federación Espírita Brasileña, que debe ser implantado en todas las estructuras del Movimiento, trayendo, más allá del dominio de las herramientas de gestación, la sensibilización para el uso de instrumentos de la calidad. Recordar que ahora el Movimiento Espírita Brasileño tiene un plano de metas elaborado para los próximos cinco años y que su éxito depende de la responsabilidad de cada espírita comprometido con la causa.

Número 3: trabajar la cuestión de las relaciones humanas y los niveles de motivación individuales y colectivos. Crear canales de comunicación eficaces entre los diversos sectores de la institución y, fundamentalmente, comprender que la Causa será siempre mayor que la Casa, teniendo en cuenta los nobles ideales de la Unificación del Movimiento Espírita.

El Consolador: ¿Como trabajador espírita qué le ha permitido vivir su larga experiencia?

A través de los años comprendí el valor del Espiritismo en la vida de los hombres. Reconocí y lucho contra mis imperfecciones. Viví y vivo oportunidades impares de cambio de experiencias con compañeros de ideal espírita de prácticamente todo Rio Grande do Sul y de varios estados del país. Tuve y tengo tanto placer de vivir conocimientos y experiencias con personas de todos los niveles culturales en reuniones, encuentros, conferencias y cursos. Fui honrado con la presidencia de la Federativa Estatal en el periodo de 1998 a 2001. Por todo, agradezco a numerosos maestros y, fundamentalmente a Dios.

El Consolador: Sus palabras finales.

Al cerrar esta entrevista desearía subrayar la importancia de la introducción del tema liderazgo de servicio en las luchas espíritas. Siendo el liderazgo “la habilidad de influenciar a personas para trabajar con entusiasmo, buscando alcanzar los objetivos como siendo para el bien común” concluí que este es un concepto que nos interesa; ¡y mucho! Habilidades, influencias, entusiasmo, trabajo, bien común, son términos del día a día de la casa espírita. Por ese motivo, aquí en nuestra 2ª Región Federativa, estructuramos un seminario en el cual abordamos el tema “Liderazgo de Servicio y Conciencia Espírita”.

La tarea, en términos de concienciación, viene repercutiendo favorablemente en los campos de la motivación de los trabajadores y en su compromiso para con la Doctrina Espírita. No más, deseo sólo exteriorizar mi agradecimiento por la posibilidad de expresar puntos de vista y experiencias (aunque comprenda y respete las opiniones contrarias), rogando que, de alguna forma, puedan ellas colaborar con compañeros comprometidos con Aquel que es, indudablemente, modelo y guía de la humanidad. Perseveremos en nuestras tareas. Mucha paz.

 


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O Consolador
 
Revista Semanal de Divulgación Espirita